«No se dan idea la cantidad de controles que tenemos que pasar. La gente se tiene que quedar tranquila con la actividad minera, que es completamente compatible con el medio ambiente», dijo Caccavari en diálogo con Evangelina Argüello y Hernán Bitar.
Marcelo Caccavari, empresario mendocino, propietario de la mina de talco Don Ernesto en Uspallata, Las Heras, conversó con el programa «Podría ser peor» por Radio Post 92.1, sobre la reactivación de la mina.
El talco es un silicato de magnesio hidratado, perteneciente a la subclase de filosilicatos. Sus cristales son delgados y laminares formando, cuando son masivos, una amplia gama de colores (es decir: blanco, rosa, verde, gris o negro). El talco se puede encontrar en varios grados, que se diferencian por su pureza, color y laminaridad.
Sus principales características son: es naturalmente hidrofóbico y lipófilo, es químicamente inerte, resistiendo muy bien a ácidos y bases; es el mineral más blando; es un buen aislante eléctrico y térmico y no es inflamable ni explosivo. Gracias a estas características, el talco es un mineral de elección en muchos usos industriales.
En los años ’90, la mina Don Ernesto dejó de funcionar y desde hace dos años y medio empezó el proceso de reactivación. «El potencial es grande, ya que en algún momento fue la mayor productora de talco del país», expresó.
«No se dan idea la cantidad de controles que tenemos que pasar. La gente se tiene que quedar tranquila con la actividad minera, que es completamente compatible con el medio ambiente», dijo Caccavari en diálogo con Evangelina Argüello y Hernán Bitar.
El proyecto ya tuvo un 80 por ciento de personas a favor en la audiencia pública y continua siendo evaluado rumbo a su puesta en marcha.
El talco se usa para la fabricación de plástico, papel, pinturas y caucho, entre otros cosas, más allá de la cosmética, explico Caccavari.