
Horacio Marín, CEO de YPF, confirmó que el proyecto insignia de la petrolera estatal sigue en marcha pero será con plantas flotantes. Se dividirá en tres fases y para cada una llegarán dos buques.
La Nueva
Las palabras de Horacio Marín, CEO de Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF) confirmando que no se construirá una planta onshore para exportar GNL causaron mucha confusión respecto de cómo queda finalmente el proyecto insignia que está encarando la petrolera estatal de nuestro país junto a otras firmas de la industria para monetizar por completo el gas de Vaca Muerta.
En los hechos no hay grandes cambios, porque el proyecto ya estaba estipulado de esa manera y nadie pensaba en la construcción de una planta en tierra porque es más costosa, tarda mucho más en terminarse e implica un riesgo mayor en términos de inversión.
Las plantas flotantes, en cambio, se consiguen más rápido y eso es clave para aprovechar esta ventana de oportunidad que hoy tiene el país y evitar que surjan nuevos competidores. A su vez, son más baratas y reducen el riesgo argentino al no tener que hundir capital en una planta que no se puede trasladar si el país cambia las reglas de juego.
Lo concreto es que todo marchaba hacia esa dirección, pero faltaba la confirmación oficial del CEO de YPF, quien lo aclaró en declaraciones al diario “Río Negro”.
Ahora está claro que el proyecto se dividirá en las tres fases que fueron mencionadas por Horacio Marín en su última presentación en Nueva York.
Cada una de ellas implica la llegada de dos buques.
La primera se realizará mediante el consorcio Southern Energy, en el que ya se confirmó uno de sus dos barcos donde PAE tiene un 40% de participación, Pampa un 20%, YPF un 15%, Harbour Energy un 15% y Golar un 10%.
Este buque llamado Hilli Episeyo tendrá una capacidad de 2,45 millones de toneladas (MPTA) y en las próximas semanas se confirmaría la decisión final de inversión (FID) del segundo barco con una capacidad de 3,6 millones de toneladas, donde el offtaker con más chances de quedarse con este volumen sería Alemania.
En ambos casos, los barcos se alquilan con un contrato de largo plazo donde se paga un fee de alrededor de 3 dólares por millón de BTU.
La fase 2 se organiza alrededor del acuerdo que firmaron YPF y Shell, que contempla la llegada de dos barcos por 5 MPTA cada uno y una sociedad que tendría estas dos compañías con una participación de entre el 30 y el 35% cada una.
A diferencia de la anterior, acá los barcos se comprarían porque, de esta manera, se obtiene una mayor rentabilidad, pero a cambio de una inversión mucho más alta.
El 25% del volumen se lo llevaría Shell como offtaker y el resto se dividiría en otras tres super majors que todavía no se confirmaron.
Por último, la tercera fase contempla unos 12 MPTA a partir de un acuerdo con la italiana Eni y donde faltan nombrar otros dos socios con los que todavía están negociando.
Cada empresa tendría un cuarto de la torta y, al igual que la segunda fase, implicaría la compra de los barcos.
En total, todas las fases suman unos 28 MPTA que equivalen a más de 110 millones de m3/d, lo que llevaría prácticamente a duplicar la producción nacional de gas y podría derivar en exportaciones por unos 15.000 millones de dólares al año.
Marín: “YPF es la mejor compañía”
El presidente de YPF, Horacio Marínl, destacó que la petrolera pasó en 14 meses de la actual gestión de valer 5.000 millones de dólares a 17.500, y sus acciones fueron “la que más subieron” a lo largo de 2024.
“YPF es la mejor compañía, puede liderar la energía y ayudar a que la argentina sea otro país, porque estamos llevando a una compañía que perdía mucho dinero a una compañía que no pierde a pesar de las bajas (a nivel internacional) del precio del petróleo”, afirmó.
Marín explicó que la baja en los combustibles registrada en las últimas horas obedece a que “cayó el precio del petróleo y tenemos un compromiso honesto con los consumidores, para que la gente sepa que hacemos las cosas como corresponde”.
En declaraciones a Radio Rivadavia, el responsable de YPF negó que el estratégico yacimiento de Vaca Muerta deje de ser rentable debido a que el precio internacional del petróleo bajo en los últimos meses de alrededor de 80 dólares por barril a unos 60 dólares.
“Para desarrollar Vaca Muerta a 45 dólares el barril ganamos dinero”, dijo y enfatizó que desde el directorio de la compañía “trabajamos para generar valor a los accionistas”.
Marín sostuvo que, a nivel de objetivos, se busca “una YPF pujante que va a tener un millón de barriles equivalentes propios en 2030, y que va a operar 2 millones de barriles equivalentes. Esto es bueno para los empleados de YPF, para la industria, para la gente y para la Argentina”, subrayó.
“Nuestro objetivo es que la Argentina en 2031 tiene que lograr exportar 30.000 millones de dólares adicionales y a principios de la década que viene va a exportar 40.000 millones de dólares por año y eso es un poco más de un campo actual”, señaló en alusión a las divisas que genera el sector agropecuario.
Autorización
La Secretaría de Energía autorizó formalmente la primera libre exportación de Gas Natural Licuado (GNL) del país al consorcio Southern Energy, con un plazo de 30 años a partir de mediados de 2027.
La habilitación concedida al proyecto del consorcio que integran Pan American Energy, Golar, YPF, Pampa Energía y Harbour Energy, contempla la instalación del buque flotante de licuefacción Hilli Episeyo frente a la costa de la provincia de Río Negro, en el Golfo San Matías.
La capacidad proyectada alcanza las 6 millones de toneladas anuales y se estima que la planta estará operativa en 2 años, por lo que se fijó la aprobación del proyecto en el período que se extiende desde el 1º de julio de 2027 hasta el 30 de junio de 2057.
El proyecto se enmarca dentro del Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), la herramienta impulsada por la administración de Javier Milei en la Ley Bases para buscar ofrecer mayor seguridad jurídica y previsibilidad a las inversiones de gran escala, especialmente en sectores estratégicos como el energético.
La habilitación de una iniciativa de estas características que permite la libre exportación de GNL es la primera en la historia argentina. Al respecto, el Gobierno nacional destacó el aval como un “paso clave” remarcando que “seguimos reforzando el perfil exportador de nuestro país”.
Asimismo, también se expresó favorablemente el Ejecutivo rionegrino indicando que con la concreción del proyecto exportador se consolida a la provincia “como un actor estratégico en el mapa energético nacional e internacional”.
Además, resaltaron que “la habilitación para exportar GNL es fruto de una visión de desarrollo que posiciona a Río Negro como una provincia seria, previsible y comprometida con la producción responsable”