
En la Puna catamarqueña, a 4000 metros de altura, se encuentra una descomunal mina que Argentina por fin se atrevió a abrirla: la mina de litio, emplazada en el Salar del Hombre Muerto -que comparten las provincias de Catamarca y de Salta- bajo el Proyecto Fénix, a cargo de Arcadium LIthium, una firma creada tras la fusión de la estadounidense Livent y la australiana Allkem.
Proyecto Fénix: la mina que nunca para
Ubicada sobre una superficie de más de 1200 hectáreas, la mina de litio funciona las 24 horas del día, en turnos de 12 horas. Las jornadas de trabajo son de 14 horas para aprovechar a pleno la luz del sol. La planta entró en funcionamiento a finales de los noventa, bajo el denominado «método de extracción directa».
La extracción se basa en la construcción de pozos de 30 metros de profundidad donde se instalan bombas para extraer la salmuera: agua con grandes concentraciones de litio en la profundidad de los salares. La salmuera es ubicada en piletas a cielo abierto para que el agua se evapore y deje en la superficie la concentración de litio.
Luego es sometida a diferentes procesos químicos mediante un sistema de cañerías y máquinas. Según afirman algunas fuentes, el 80% de la producción es convertido en carbonato de litio, material que Tesla y otras automotrices como BMW persiguen para la fabricación de baterías, por ejemplo.
El 20% restante se va a otra planta que la compañía tiene en la localidad de Güemes para transformarlo en cloruro de litio. Este material se utiliza para la fabricación de litio metálico y es muy demandado por la industria farmacéutica.
Importancia del Proyecto Fénix
El Proyecto Fénix tiene una movilización de aproximadamente 40 camiones diarios para transportar materias primas e insumos, por lo general, hacia los puertos chilenos de Antofagasta y Mejillones, en una proporción de 60% para estos y hacia el puerto de Buenos Aires, un 40%.
Su actividad de extracción, producción y transporte del litio, ha provocado un impacto económico en Catamarca y Salta. Las fuentes afirman que Arcadium Lithium ha impulsado un «efecto derrame» que ha generado pleno empleo en la región.
Cerca de 500 personas están involucradas trabajando y viviendo allí durante siete días. Luego regresan a sus hogares por otros siete días. Según afirma La Nación, en el campamento central hay alrededor de 250 dormitorios, además de un comedor, servicios de lavandería, espacios de recreación, sala de música, cancha de fútbol, internet y calefacción centralizada, entre otros servicios.
A esto habría que añadir otros campamentos satélites para contratistas y trabajadores eventuales. Empresas de servicios de alimentación, logística y construcción se han asentado en la zona.
Asimismo, el Proyecto Fénix ha creado un programa de contratos de aprendizaje en la localidad de Antofagasta de la Sierra, para brindar oportunidades laborales a los jóvenes locales bajo el aprendizaje que ellos imparten sobre la actividad minera. Entre 2017 y 2023, más del 70% de los participantes de este programa fueron contratados por la empresa, según afirma La Nación.
Mapa del litio en Argentina
El mapa del litio en la Argentina ha incluido un total de 49 proyectos aproximadamente, de los cuales tres, descartando el Proyecto Fénix, están en fase de producción. Dos de ellos se desarrollan en Jujuy: uno en el Salar de Olaroz, ejecutado también por Arcadium Lithium; y otro en Cauchari-Olaroz, de la minera Exar, una compañía argentina conformada por Ganfeng Lithium, Lithium Argentina y Jujuy Energía y Minería Sociedad del Estado.
El tercer proyecto está en la zona del salar Centenario Ratones, en Salta, pertenece a Eramine Sudamérica, firma creada por el grupo francés Eramet y por la siderúrgica china Tsingshan, que fue puesto en marcha en julio de 2024