
Desde Salta, Jujuy, Tucumán, Chaco y Córdoba se expresaron con cautela sobre los beneficios. «Mucha sed de dólares. No les importamos, todos vampiros del campo», sostuvo una referente cordobesa.
El fuerte de la cosecha de maíz en el norte se realiza entre julio y agosto, por lo que sus productores no podrán beneficiarse con la baja de las retenciones.
En relación a la disposición oficial, consideró que «no es lo mejor» pero es un paso adelante, aunque «los márgenes que hay para los granos son nulos o negativos». «No es una cuestión de escalas, mientras más siembra, más se pierde cuando la rentabilidad es negativa. Esto es un muy pequeño alivio que nos deja con el agua hasta la nariz, pero si hay una ola ya no se va a poder respirar», advirtió.
Para concluir, el referente tucumano sostuvo: «Los números siguen siendo malos para el productor tucumano, para el salteño, pero como digo, la medida marca un camino, hay un mensaje y es importante que las provincias vayan en el mismo sentido que la Nación”. “De nada sirve que la Nación baje impuestos y las provincias y municipios los aumenten. Deben transitar el mismo camino», concluyó.
«No puede traicionar a parte de sus votantes»
En el centro del país también comenzaron a verse expresiones críticas. Esta vez, de la presidenta de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria Limitada (Coninagro) Córdoba, Vanesa Padullés, que se manifestó a través de su cuenta en la red social X. «Los exportadores deben liquidar divisas en 15 días sino se paga alícuota anterior. Mucha sed de dólares, creía que fuera más por amor al sector. No les importamos, todos vampiros del campo».
«Bajar de manera gradual las DEX es como igual de malo que segmentar: ¿qué pasará el día después del vencimiento medida? ¿Qué pasará con la tonelada que supera una segmentación o la que no? Cuando el tema es dañino, lo es en toda su magnitud y todo lo que dure. Deben ser del 0%», señaló en un segundo posteo. Y cerró: «Los productores venderemos lo mínimo y necesario y el Gobierno no puede retroceder en esta medida, sino avanzar a la quita. No puede traicionar a parte de sus votantes y promesas electorales».
En el Chaco tampoco dudaron en calificar a la medida como recaudatoria. «La baja de las retenciones a la soja no benefician en nada al pequeño y mediano productor, ya que es una medida totalmente recaudatoria, nada más, por parte del Gobierno nacional», definió Javier Druzianich, delegado en esa provincia de la Federación Agraria Argentina (FAA).
Desde Roque Sáenz Peña, el dirigente señaló que para el sector primario de la provincia no va a dar ningún beneficio la decisión. «Ahora el productor que está en la chacra esperando por un poco de lluvia deberá hace nuevamente toda la declaración jurada y en las plantas acopiadoras rehacer todo el papeleo, porque si se presenta la documentación y en quince días no despachas la producción, se cae todo. Así que por donde se mire, no se verá el beneficio para la totalidad del mediano y pequeño productor», aseguró en un contacto con medios locales. «La medida de baja de las retenciones fue algo traído de los pelos, y solamente buscan hacer caja, porque es algo que jamás estuvo consensuado con las entidades agrarias», agregó Druzianich.
«Una gota en medio del mar»
Conocida la decisión de la baja temporaria de los DEX, Jorge Brugnoli, titular del Grupo Brugnoli, con base en Pampa del Infierno, en Chaco, y campos en también en Salta y Santiago del Estero, analizó que la quita parcial de las retenciones «aparece como una gota en medio del mar». «Quitando todas las retenciones y pagando precios llenos por todos los granos, como en la época de (Mauricio) Macri y de (Carlos) Menem, el 35% de Impuesto a las Ganancias es mucho mayor y hay que seguir pagándolo», alertó Brugnoli. Por eso, indicó en una entrevista a Diario Norte, «que a la hora de analizar otras mejoras impositivas, como la necesidad de sacar el Impuesto a los Sellos y a los Ingresos Brutos, que el productor también paga y que son los más distorsivos junto con las retenciones».
De todos modos, el empresario consideró que «hay que ir de a poco y me parece prudente lo que hace el ministro de Economía, Luis Caputo, de no negociar el déficit fiscal, porque mientras vaya sobrando plata y no haya déficit, se irán rebajando impuestos». Puso el acento también en que «el 21% de IVA sobre los alimentos es mucho y debe bajarse en forma gradual».
Consultado sobre el escenario de la soja, teniendo en cuenta el que hasta junio solo se puede obtener el beneficio de baja de las retenciones, Brugnoli aseguró que «los productores evaluarán el escenario a cosecha y algunos podrían guardar la soja si ven que las condiciones no son tan favorables, incluso con la anunciada rebaja impositiva». «En Argentina, el precio más bajo de la soja es en abril y mayo, en plena cosecha», recordó. «El productor aprendió con este país que cambió tantas veces de moneda, a guardar en el producto que produce y no en oro o en divisas. Por eso, puede vender trigo, girasol, pero soja y maíz no los vende, los tiene de encaje y los guarda. Y eso seguirá así hasta que este país, en cinco o diez años, tenga estabilidad», sostuvo