Esta actividad se enmarca dentro del Programa Nacional de Prevención por Rama de Actividad (PRONAPRE).
En un esfuerzo concertado por mejorar las condiciones laborales en el sector minero de Río Negro, diversos representantes de la Mesa PRONAPRE llevaron a cabo un recorrido extensivo por nueve establecimientos mineros en la región. Esta actividad se enmarca dentro del Programa Nacional de Prevención por Rama de Actividad (PRONAPRE), cuya finalidad es analizar las condiciones de trabajo y establecer estrategias que promuevan la seguridad y salud de los trabajadores mineros.
Durante este exhaustivo recorrido, se visitaron yacimientos clave que se dedican a la extracción de materiales esenciales tales como arena silícea, bentonita y yeso ubicados principalmente en el Alto Valle. Esta iniciativa no solo convocó a la Secretaría de Minería, sino que también integró la colaboración de la Secretaría de Trabajo, Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT), asociaciones gremiales como AOMA, productores mineros, aseguradoras y la Cámara Minera, instaurándose así un enfoque inclusivo y colectivo.
María Elisa González Clavin, una destacada representante de la SRT, destacó la novedad del enfoque cuando compartió que las actividades no persiguen un objetivo exclusivamente inspectivo, sino que buscan un diálogo constructivo entre todos los actores involucrados para propiciar mejoras significativas en el ámbito laboral. «La idea es potenciar el diseño de estrategias preventivas y la elaboración de documentos educativos sobre buenas prácticas que reduzcan ostensiblemente los accidentes y enfermedades laborales», manifestó.
Federico Ferrer, quien es el responsable de Inspección y Fiscalización en la Secretaría de Minería, explicó la razón detrás del relevamiento: era imperativo entender cómo se desarrollan los procedimientos de minería in situ. «El recorrido por el Alto Valle fue el comienzo; el plan incluye extender estas actividades a regiones como la diáspora de diatomita en la Región Sur y las vastas Salinas de Gualicho. Privatizando la consolidación de un manual exhaustivo de buenas prácticas en seguridad e higiene laboral, se desea perdurar una cultura de seguridad continua», agregó Ferrer.
Por su parte, el gremio AOMA, a través de su representante Tomás Marín, expresó la importancia de incluir la perspectiva de los trabajadores mineros en este tipo de iniciativas colaborativas. Subrayó cómo «la participación directa de los trabajadores en campo contribuye a un diagnóstico realista y efectivo». Además, resaltó que la adopción de manuales prácticos vinculados a la seguridad por parte de las provincias hermanas ya está mostrando beneficios notables, disminuyendo dramáticamente los riesgos laborales.
La Mesa PRONAPRE, conformada desde julio, se ha comprometido a seguir colaborando incesantemente en el desarrollo de materiales preventivos destinados a ser distribuidos ampliamente entre los empleados mineros. La primera etapa de esta noble iniciativa concluyó con un balance muy positivo que deposita grandes esperanzas en su futuro, además de reafirmar el firme compromiso de Río Negro hacia un entorno más seguro y próspero para todos sus mineros.