EL CALAFATE.– Los majestuosos senderos de trekking en la zona de El Chaltén dejaron de ser gratis: ahora para recorrerlos o bien acampar, se deberá pagar una entrada. Así lo dispuso la Administración de Parques Nacionales (APN) a partir de la resolución 228/24, en la que se establecieron las nuevas tarifas para el acceso a las áreas protegidas de todo el país y se dispuso el cobro a lugares que hasta el momento siempre habían sido gratis. Los tickets se adquirirán online y habrá controles en la entrada de los circuitos.
La medida generó controversias en esta localidad, capital nacional del trekking, que se fundó hace 39 años a partir de la cesión de hectáreas del Parque Nacional Los Glaciares (PNLG) y hoy es la meca de escaladores y caminantes de todo el planeta que llegan a recorrer los senderos y a escalar los picos de granito color caramelo. En temporada alta, suman cerca de 3500 caminantes por día y acampan en los dos campings agrestes; hasta ahora, lo hicieron sin pagar entrada, pese a estar dentro de un parque nacional. Sin embargo, como nunca hubo controles, no hay registros oficiales del número exacto de visitas.
La fama mundial que adquirió el destino generó un crecimiento exponencial con el correr de los años, en tanto que el escaso personal de parques en la seccional Lago Viedma dificultó controles en los senderos y escasez de información sobre los cuidados que se deben tener dentro de un área protegida. El cobro de entrada y el acuerdo firmado con una asociación civil local para el control y cuidado de los campamentos apuntan a mejorar el correcto mantenimiento del parque nacional.
“Iniciamos un camino hacia la autosustentabilidad. El plan es que para fines de 2027, la APN funcione solo con el dinero que recaude. Vamos a contribuir a bajar el gasto público para eliminar la inflación”, sostuvo a través de sus redes sociales Cristian Larsen, presidente del directorio de la APN, fundamentando la resolución.
Larsen explicó que el presupuesto de la APN en 2023 estuvo compuesto por un 75% proveniente del Tesoro Nacional y el restante, de ingresos obtenidos a partir del cobro de entradas de los parques y de canon por la explotación de servicios turísticos dentro de los predios. “Es decir, los argentinos con sus impuestos financiaban el 75% del funcionamiento de los parques nacionales. El kirchnerismo dejó un 50% de pobres en el país y hoy son ellos los que con sus impuestos financian a quienes hacen turismo en los parques nacionales. No lo vamos a permitir”, sostuvo el presidente del directorio de la APN.
“¿Por qué cobramos entradas en El Chaltén? Senderos descuidados, baños en mal estado, campings precarios y una deficiente atención. Todo esto es producto de la falta de recursos. Estamos dispuestos a elevar la vara, a ofrecer servicios que estén a la altura de la belleza paisajística de El Chaltén”, sostuvo Larsen en las redes sociales.
En esa misma línea, el actual intendente del Parque Nacional Los Glaciares, Horacio Pelozo, mantiene hace semanas reuniones con los vecinos de El Chaltén para implementar el sistema de cobro. “La compra de entrada será totalmente online, lo ideal es que el turista llegue al portal de ingreso con la entrada en su teléfono, donde se le escaneará el código QR con un lector óptico. De todos modos, vamos a equipar con posnet los tres portales que se habilitarán por ahora en la red troncal de senderos de uso masivo”, detalló Pelozo en diálogo con LA NACION.
El cobro de entrada se empezará a implementar el 4 de noviembre, y los visitantes deberán mostrar sus tickets adquiridos en los portales Río Eléctrico, Casa Amarilla y Mirador de Cóndores, en tanto que próximamente se habilitará un cuarto portal. Por los próximos 60 días, la operación estará a cargo de guardaparques de control territorial.
Si bien Pelozo asumió hace pocos meses al frente de la intendencia del PNLG, es un experimentado guía de montaña y fue coordinador del proyecto “Huella Andina”; ejerció como guardaparque y guía gran parte de su vida en el Parque Nacional Nahuel Huapi, en tanto que también fue intendente del Parque Nacional Lanín entre 2016 y 2019. La actual gestión espera sumar nueve brigadistas para reforzar la brigada de Incendio, Comunicaciones y Emergencias (ICE) y proyecta construir una subcentral de incendios.
“Son lugares maravillosos, pero no se los puede dejar sin gestión, porque cuando hay una sobredemanda que genera rebasamiento empiezan los problemas”, afirmó Pelozo a LA NACION y destacó la importancia de poder establecer la capacidad de carga mínima en los campamentos, acotar horarios y establecer rangos de visitación. “El campamento Poicenot llegó a tener 200 carpas en menos de una hectárea de bosque, sin baños o con letrinas sucias, 400 personas pernoctando en esas condiciones generaba un enorme grado de contaminación”, detalló.
Pese a la prohibición de hacer fuego en los campings que no tenían presencia de autoridades ni controles, el verano pasado circularon videos de turistas que encendían fogatas poniendo en riesgo a todo el parque nacional. Como parte del plan de gestión se establecieron cupos por día para acampar: será de 120 personas en el campamento Poicenot y de 70 para el campamento De Agostini, en tanto que se espera implementar un sistema de reservar. Además ahora ya no serán zonas de acampe gratis, se deberá pagar una tarifa mínima.
La intendencia del parque convocó a la asociación civil “Amigos del Parque Nacional Los Glaciares” para que lleven adelante una gestión sostenible de las dos áreas agrestes de acampe. Se trata de una entidad sin fines de lucro, formada por vecinos de El Chaltén que hace años trabajan de manera voluntaria en el cuidado y la conservación del parque nacional.
“Nosotros tendremos a nuestro cargo la gestión de los campamentos Poicenot y De Agostini, ubicados en el área de uso público intensivo. Seguirán siendo campamentos agrestes, pero ahora habrá pautas de cuidado del entorno, pondremos baños secos y los mantendremos en buen estado, bachas con tratamiento de aguas grises para evitar que los campistas laven sus utensilios en ríos y arroyos, evitando así la contaminación del agua con detergentes, jabones y aceites”, explicó Paz Fiorito, miembro de la asociación, a LA NACION.
A partir de la firma, la asociación civil tendrá a su cargo el cobro de la tarifa por el pernocte, que se destinará al pago de salarios de quienes lleven adelante la tarea en el lugar; de haber excedentes, los destinarán a los programas de cuidado ambiental, difusión informativa, educación y apoyo a la ciencia que desarrollan desde que se crearon hace casi cinco años.
El servicio de camping rentado empezará en diciembre y se espera, en el futuro, implementar los espacios con reserva previa. “Los campamenteros se irán alternando, recorrerán los senderos y estarán disponibles para informar a los visitantes. La intención es bajar lo más posible la ocurrencia de incidentes dentro del parque, que puedan seguir habiendo campamentos agrestes y sustentables”.
El tarifario para los parques nacionales
La resolución 228/24 de la APN estableció las nuevas tarifas y categorías en los parques nacionales Iguazú, Los Glaciares, Lago Puelo, Tierra del Fuego, Nahuel Huapi, Los Arrayanes, Los Alerces, Lanín, El Palmar, Talampaya y Sierra de las Quijadas, a partir del 4 de noviembre de 2024: los visitantes extranjeros, $45.000; turistas nacionales; $15.000; estudiantes, $7000, y residentes provinciales, $5000. Las demás categorías están exentas del pago.
En todos los parques, se aplicará el beneficio de 50% de descuento en valor del derecho de acceso para el segundo día de un mismo visitante, que tendrá una vigencia de hasta 72 horas a partir de la primera fecha de visita especificada en el momento de realizar la compra, no siendo necesario que las visitas sean en días consecutivos.
En todos los casos, es necesaria la presentación del documento de identidad o pasaporte vigente en la boletería en el momento de adquirir la entrada. El domicilio que conste en dicha documentación será el determinante para establecer la categoría del visitante y, por ende, el valor de la entrada respectiva, en tanto que corresponderá acreditar la condición de estudiante, jubilado o pensionado, discapacidad o de veterano de la Guerra de Malvinas.
Además se lanzó un Flexipass, un ticket promocional que también se puede comprar en la web y habilita el ingreso a un mismo parque nacional independientemente de la portada de acceso. Se trata de un pase único e intransferible, en virtud del cual el visitante podrá seleccionar entre 3 días o 7 días, para ser utilizados en un mismo parque nacional dentro de los seis meses de adquirido, de manera consecutiva o alternada. Se emite 1 ticket por la cantidad de días correspondiente, que deberá presentarse en el portal en el cual se ingrese en cada oportunidad.
También habrá un pase anual de venta digital: único e intransferible, de acceso ilimitado a todos los parques nacionales y áreas protegidas independientemente del lugar de residencia del comprador por un período de 12 meses desde su adquisición.
Estarán exentas de pago jubilados y pensionados, menores de 6 años, integrantes de visitas educativas, personas con discapacidad y un acompañante, residentes locales (El Calafate, Tres Lagos, El Chaltén), miembros de visitas protocolares, agentes de la APN, guías y coordinadores.
La compra online se podrá realizar a través de la página oficial https://www.argentina.gob.ar/interior/ambiente/parquesnacionales, en “Compra de entradas” o ingresando directamente al siguiente link: https://ventaweb.apn.gob.ar/