Le pedirán a las provincias que les envíen información sobre las deudas que aseguran que nación tiene con ellas, luego verán si las pueden saldar cediéndoles, empresas, rutas, terrenos y otras posesiones que son del Estado Nacional.
El Gobierno nacional anunció este jueves la creación del Régimen de Reparación Federal, que será formalizado mediante un decreto a publicarse este viernes en el Boletín Oficial. El nuevo sistema permitirá a las provincias negociar la cancelación de deudas de la Nación a través de bienes federales como tierras, empresas y rutas, según explicó en conferencia de prensa Lisandro Catalán, vicejefe de Gabinete del Interior.
Un acuerdo opcional para las provincias
Catalán aclaró que el régimen es opcional, permitiendo que cada provincia evalúe si desea adherirse para cancelar sus deudas con la Nación. «Es un borrón y cuenta nueva entre los gobernadores y la Casa Rosada, para que tengamos claras las compensaciones entre la Nación y las provincias«, aseguró, señalando que el objetivo del régimen es avanzar hacia un federalismo más auténtico y descentralizado. En esta línea, los gobiernos provinciales podrán proponer soluciones específicas para sus pasivos.
Un marco de negociación y compensación
El sistema establece una mesa de diálogo entre el Gobierno nacional y los mandatarios provinciales, con un plazo de 30 días hábiles para que cada provincia manifieste su intención de participar. Los distritos interesados tendrán 60 días para presentar la documentación que respalde las deudas que pretenden incluir. Además, el decreto contempla que las provincias podrán negociar compensaciones y conciliaciones para lograr la cancelación de sus obligaciones.
Compensaciones con bienes federales
Catalán destacó que una de las principales novedades del régimen es la posibilidad de compensar deudas con activos del Estado. «Se pueden acordar transferencias de empresas, de acciones, rutas o tierras fiscales que podrían ser mejor aprovechadas por las provincias para concesionarlas en su beneficio«, indicó. Además, si las deudas son favorables a la Nación, las provincias tendrán la opción de saldar con un porcentaje de los recursos provenientes de la coparticipación.
Un nuevo camino hacia el federalismo real
La implementación de este régimen busca corregir años de desequilibrio financiero entre la Nación y las provincias. «Nuestra Constitución fija un régimen federal, pero las distintas gestiones de gobierno han mantenido una práctica unitaria«, afirmó Catalán, subrayando la necesidad de un verdadero federalismo que permita a las provincias tener mayor control sobre su desarrollo financiero.
Con esta iniciativa, el Gobierno nacional apunta a consolidar una relación financiera más equitativa con las provincias, permitiendo que cada una avance en la administración de sus recursos y se libere de viejas deudas en condiciones negociadas