Daniel Dreizzen, Managing Director de la consultora Aleph Energy, desmenuzó que hay detrás de los récords de producción de petróleo y gas.
Mes a mes se difunden estadísticas de los récords de Vaca Muerta. El mundo de la energía ya se está habituado a números que destronan números en cuanto a producción o fracturas. Sin embargo, hay quienes discuten con las cifras, miran más allá y recuerdan que estamos lejos de la mejor marca de la historia del país, aun a pesar del impulso de la cuenca neuquina.
“Argentina increíblemente a finales de la década del 90, o sea, por el año 2000, llegó a producir 850.000 barriles por día. Hoy está alrededor de los 700.000, subiendo fuertemente por Vaca Muerta que empezó a producir alrededor del año 2015. Antes era todo convencional y venía en su mayor parte del Golfo San Jorge”, repasó Daniel Dreizzen, Managing Director de la consultora Aleph Energy.
El exsecretario de Planeamiento Energético de Argentina, aseguró que “para el petróleo, la verdad es que está muy encaminado por varios motivos. Primero porque hay precio. Argentina más o menos consume 500.000 barriles y produce aproximadamente 700.000 barriles. Entonces, ya están cubiertas las necesidades y todo barril extra se exporta, que tiene un precio muy bueno, o bueno para Vaca Muerta (75/80 dólares)”.
Por otro lado, Dreizzen agregó: “también hay capacidad de evacuación. Se están haciendo obras, se habla de duplicar la capacidad del Oldelval, hay proyectos de YPF, más las exportaciones a Chile o a Brasil. Por todos estos motivos y por la nobleza de la roca de Vaca Muerta, es que está volviendo a crecer fuertemente la producción”.
“Si uno mira el mediano plazo, en los próximos cinco o seis años, desde el punto de vista de las divisas, casi todo va a ser petróleo, gas va a crecer, hay proyectos, pero en corto plazo y lo más rápido es el petróleo. ¿Por qué? Porque es más fácil, es un líquido, se almacena”, indicó el consultor.
El desafío para el gas de Vaca Muerta
¿Y el gas de Vaca Muerta? Según Dreizzen el panorama es más complejo. “Hay dos formas de crecer con el gas. Una es la más básica, que es reemplazar las importaciones. Argentina importa en el invierno mucho líquido y gas licuado. Entonces, lo primero es reemplazar esas importaciones”, señaló.
“Queda lo regional, Argentina está reexportando a Chile, que lo había suspendido con la crisis de 2001. Ahora se le vuelve a exportar a Chile con un poco volumen y está el proyecto de exportar a Brasil, porque ya tenés la infraestructura, que es lo más difícil”, comento en el aire de LU5.
¿Es viable el megaproyecto de GNL?
En este punto, Dreizzen aseguró que la forma de “monetizar los recursos de Vaca Muerta es con el gran proyecto de GNL, que lidera YPF. Es un proyecto muy grande que requiere miles de millones de dólares y que estaría listo no antes del 2032 aproximadamente, según los pronósticos”.
“Es un proyecto factible, pero la verdad es que hay que ser sinceros y es un proyecto que todavía no está lanzado. Me parece genial que se empuje, que seamos optimistas, pero con la discusión de qué provincia se iba a hacer, se pierde vista que todavía falta mucho”, dijo Dreizzen.
“Falta para que haya la confianza necesaria para que se firme un contrato de compra de este futuro gas a un determinado precio. Eso permite financiar estos proyectos. Hay muchos pasos, tenés que hacer los pozos, tenés que hacer un gasoducto, tenés que llegar a una planta en tierra que lo licúe y también tenés que subirlo a los barcos para exportarlo. Construir todo eso leva tiempo, la cuestión contractual de la cadena tampoco es simple. La decisión final de la inversión todavía no está tomada”, consideró el director de Aleph Energy.
Los cuellos de botella
“Buenas noticias Vaca Muerta venimos teniendo hace varios años. Siempre digo que Vaca Muerta es un proyecto tan productivo que venció a los descalabros de la economía”, agregó el analista.
En este punto, señaló que “cuanto mejor hagamos la tarea, más rápido va a crecer y más rápido la energía va a ayudar a la economía. Hasta ahora, la economía había sido un problema porque había le había sacado dólares, le saca plata por los subsidios también”.
“Los principales cuellos de botella, en general, tienen que ver con ser un país más normal desde el punto de vista del financiamiento. Es decir, si vos querés que esto crezca, necesitas más plata, más inversión, no alcanza con la reinversión que ha habido hasta ahora. Con esta reinversión creció lento, para el GNL necesitas que entre fuerte, más plata, más jugadores y la estabilización de la economía, principalmente que sea un país normal para operar los dividendos”, comentó.
Para terminar, hizo foco en el RIGI al decir que “la ley ayuda, pero es muy nueva y la confianza tarda en llegar. Hay que ver si esto es sostenible el tiempo o es un capricho que duró dos o cuatro años”