Este miércoles se conoció el dato de inflación de Mendoza del mes de julio, el cual arrojó un 4% y un acumulado en todo el 2024 del 87%. Los economistas estiman que podría acercarse a finales del año cerca del 2%, similar al porcentaje de devaluación que lleva adelante el Banco Central como parte de su política monetaria.

Esta inflación que aún es alta, convive con un esquema de recesión de la actividad económica que, si bien colabora con la baja de los precios, genera complicaciones en el sector privado.

En Mendoza, la caída en la actividad se puede notar en la reducción en la recaudación de Ingresos Brutos, un tributo íntimamente ligado a la actividad económica. Este impuesto cayó en términos reales un 8% durante los primeros seis meses del año

Este jueves, se realizó la 15º edición del Foro de Compensaciones y Beneficios organizado por Gestión Capital Humano, en la cual expusieron los economistas Paula Ariet y Gustavo Reyes, de Fundación Mediterránea.

Allí explicaron que las claves para acelerar la recuperación de la economía en Mendoza son la baja de impuestos y la recuperación del poder adquisitivo de los asalariados.

Reyes afirmó en diálogo con El Sol que, si bien a nivel nacional es donde tienen la mayor cantidad de instrumentos para poder contribuir para reactivar la actividad económica, Mendoza debería avanzar con una baja de impuestos para ganar competitividad.

“La mejora de la actividad va a beneficiar la recaudación, pero más allá de esto, es importante que la Provincia, aunque no tenga déficit, haga un ajuste del gasto muy importante. Porque es necesario bajar los impuestos para ganar competitividad. La única forma de bajar impuestos es bajar el gasto”, afirmó Reyes.

En este sentido opinó que estas “distorsiones” que generan los altos impuestos en la economía, se van a notar muy fuerte luego de que la inflación caiga y la macroeconomía se estabilice.

“Hay muchas cosas que están mal de la economía que la inflación disimula. Todos los costos y las ineficiencias se van a notar. Hay mucho de estos en las empresas y en el estado. Cuanto más se anticipe el Estado en bajar el gasto y los impuestos, como Sellos, o Ingresos Brutos, más rápido se recuperará la economía”, explicó el economista de la Fundación Mediterránea.

Por su parte, Ariet coincidió que una baja de impuestos sería clave para poder mejorar la competitividad de la economía y reactivar el consumo.

“Es fundamental, tanto para el sector empresarial como para el consumidor que los impuestos bajen. Eso nos va a hacer mucho más competitivos. Sin dudas, el más distorsivo de todos es el de Ingresos Brutos, y es el que hay que apuntar a bajar”, indicó Ariet.

A pesar de esto, desde el oficialismo provincial, si bien coinciden con que es necesaria una baja de la tasa de Ingresos Brutos, aseguran que no están las condiciones para hacerlo.

Hay que recordar, que Ingresos Brutos explica más de la mitad de los ingresos de origen provincial, y en torno al 25% de la recaudación total.

Mejoras de salario

Otra pata clave para la recuperación económica es que el sector asalariado tenga una mejora del poder adquisitivo. Sobre este punto, Ariet aseguró que, aunque este año es probable que los sueldos le ganen a la inflación, si se mira “la foto completa” falta mucho terreno para recuperar.

“Según nuestros estudios, el sector empresarial en promedio ajustará los salarios un 165% en el 2024 contra una inflación que estará en torno al 125%. Esto es positivo, pero no suficiente, porque la caída del poder adquisitivo de finales del 2023 fue brutal. Estamos mejor que hace un mes, pero peor que hace un año”, explicó.

En este punto, señaló que la situación es delicada, “porque los aumentos se deben dar en un contexto donde las empresas no crecen en producción