En el vecino país preocupación genera la caída en el ranking de atractivo de inversiones mineras que emitió el Instituto Fraser la semana pasada.
El espacio que le da al tema uno de los diarios más importantes de Chile, el principal productor de cobre del mundo y un país minero por excelencia, muestra la relevancia que tiene el informe que elabora el Instituto Fraser de Canadá y que, en el caso de Mendoza, fue cayendo año tras años en los últimos puestos hasta que terminó por caerse en el informe del 2022.
La relevancia que se le da en Chile al ranking y a los problemas específicos que ve en el desarrollo minero trasandino para hacerlo bajar en el listado, es una muestra de lo que significa este informe y el objetivo por el cual se emite. Tiene como finalidad mostrar a los distintos distritos del mundo, y a sus autoridades, las materias pendientes que deben mejorar o resolver para convertirse en un destino más atractivo para los inversores.
En el sector minero de Mendoza se le da mucha importancia, pero durante el tiempo hubo funcionarios que le bajaron el perfil y lo miraron de costado, cuando se trata de un informe del que participan muchos actores de la industria (grandes y pequeñas empresas) y con un porcentaje importante de respuestas a las encuestas obtenidas desde las compañías junior, que precisamente son las que se dedican a la exploración.
Si bien el atractivo de Mendoza se frenó a partir de la Ley 7.722 (y su mal posicionamiento en el informe Fraser durante más de una década se debe en gran parte a la ley antiminera), el documento no se limita a la cuestión jurídica y el potencial geológico, sino que abarca muchos aspectos de la industria que quizás sólo son relevantes para quienes tienen que tomar decisiones a la hora de poner o no recursos en el desarrollo de una exploración.
Es importante que en el camino para que la minería sea una política de Estado, tomemos este tipo de herramientas y con la humildad propia de los que empiezan a recorrer un camino en el que somos inexpertos, nos pongamos a revisar el documento y veamos qué tenemos que mejorar y, además, decir claramente qué es lo que realmente frenó el avance de la minería en Mendoza