«Estamos terminando de evaluar las alternativas que tenemos a disposición para que deje de ocurrir», añadió.
Adorni caracterizó a la práctica como «un abuso». «Tienen cautiva a la gente para cobrarles o recaudar una tasa municipal que nada tiene que ver con la carga de combustibles», insistió. Lejos de explayarse o brindar información sobre cuáles son los elementos irregulares que fueron hallados, Adorni no aportó detalles al respecto.
Cuestionamiento oficial
El tema que Adorni introdujo en la agenda es parte de una tensión que no es una novedad. En 2020, la Federación de Empresarios de Combustibles (Fecra) denunció que en algunos municipios del Conurbano bonaerense se registraron aumentos. Y argumentaron que se debió a la suba la suba en la tasa vial, que se cobra en el surtidor.
A mediados de abril de este año, representantes de las expendedoras de combustibles realizaron un encuentro con sus pares de actividades industriales. «Acordaron presentar acciones para frenar la aplicación de tasas municipales y tributos superpuestos que afectan la rentabilidad», indica un comunicado publicado por la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la Argentina (CECHA).
«Vale recordar que este aporte obligatorio que implementaron muchos municipios y que otros tantos quieren llevar adelante está basado en la recaudación a través del cobro de un porcentaje extraordinario por cada litro de combustible o metro cúbico de GNC para gastos de las intendencias que lo aplican», indicaron desde la institución.
De esta manera, el Gobierno nacional abrió un nuevo frente: si antes había tensado el vínculo con los gobernadores y los legisladores, entre otros, ahora apunta a las administraciones más ligadas al territorio como son los municipios.
Por el momento, no se conoció una postura orgánica por parte de los jefes comunales respecto al planteo. Sin embargo, la proliferación de frentes en la que insiste el oficialismo tiene como contrapartida que son más los sectores que quedan en la vereda de enfrente. La pregunta es si esto será suficiente para avanzar en una articulación.
El tema de la tasa sobre los combustibles fue uno de los temas de la reunión de Gabinete de ayer, que no contó con la presencia del presidente Javier Milei.
Ante la caída de los ingresos por la crisis y el ajuste público implementado desde Casa Rosada, varios jefes comunales del conurbano bonaerense decidieron implementar una serie de tasas e impuestos para equilibrar sus cuentas.
Del total de comunas que conforman el Gran Buenos Aires, 19 ya aplican o tienen previsto aplicar esta tasa, la cual varía entre el 1,5% y el 2,5% del precio del litro de combustible, o se establece como un monto fijo.
Por este costo adicional, el precio de los combustibles puede variar a pocos kilómetros de distancia en el conurbano bonaerense. Los municipios de Merlo, Pilar y Moreno encabezan el ranking. En el distrito que conduce el intendente peronista Gustavo Menéndez rige una alícuota del 2,50% para los combustibles líquidos y sube a un 4,50% para el GNC. El pilarense Federico Achával, también de Unión por la Patria, decidió este año también crear una de estas tasas por valores similares. Fuente: Infobae