Estas personas le han costado por cada años (y durante 10 años) la suma de 500 millones de pesos, es decir en total unos 5 mil millones de pesos, sin haberle trabajado a Fomicruz un solo día, dado que estaban afectados a dos plantas de cortes de pórfido, una en Pico Truncado y otra en Gobernador Gregores las cuales hace muchos años que han dejado de funcionar por costos en el corte de la piedra y los problemas de transporte que existen para sacar la producción en medio de caminos de tierra y piedras cortantes que por kilómetros destrozan cubiertas de los camiones, razón por lo cual todo el pórfido que allí se extraía, dejó de explotarse por decisión de Fomicruz; no obstante y a pesar de todo, desde la presidencia de la minera estatal, se les siguió pagando sin ninguna obligación de prestar tareas.
Ahora, Vidal, el gobernador que discursea, no investiga y mucho menos denuncia ante la justicia a la corrupción del anterior gobierno provincial, ha decidido salomónicamente recomponer la situación de los ñoquis de Fomicruz, hacer “tábula rasa” como Milei con parte de la corrupción kirchneristas y en vez de investigar y denunciar a, por ejemplo, Esteban Tejada (Presidente), Daniel Pérez (Vice) y Débora Ocampo (Gerente General), solo por mencionar las últimas autoridades de Fomicruz o Miguel Ángel Ferro, si queremos ir un poco más atrás para buscar responsables de que Santa Cruz haya perdido 500 millones de pesos por año para alimentar vagos, el Gobernador los premia dándoles trabajo, poniéndolos en blanco en la nómina provincial y haciendo la vista gorda a los 10 años que esta gente no cumplió ninguna función y cobró religiosamente del presupuesto provincial.
Algo parecido ocurrió, aunque con matices distintos, con el blanqueo que hizo el actual gobierno de un grupo importante de personas subsidiadas por años en la provincia, primero bajo la denominación “Fundación Olivia” y luego renombrada “Santa Cruz sustentable” que Vidal resolvió poniéndolos (también) a trabajar en el área de Educación en Caleta Olivia.
Mismas recetas e iguales prácticas. Lo hicieron todos y cada uno de los gobernadores anteriores y lo repite Vidal. Recicla ñoquis y vagos para no pagar ningún costos político. Y difunde casi a tono de “conquista” el hecho de “hacer trabajar” a los que por años percibieron salario sin hacerlo.
En el caso de Fomicruz, hay 45 personas que robaron fondos públicos mediante la excusa de un trabajo que no realizaban. Hubo al menos seis o siete funcionarios responsables de pagar sueldos en un verdadero fraude al Estado y al menos administración fraudulenta, pero faltan las denuncias a los perpetradores de ese fraude, que están identificados con nombre y apellido, pero Vidal y el SER, junto a los partidos que lo acompañan, no quieren ver y mucho menos, les interesa denunciar en los juzgados penales. (Agencia OPI Santa Cruz)