La convocatoria a una Asamblea General de YPF el 26 de abril despierta controversia por la posible asignación de bonificaciones a ejecutivos, mientras la empresa enfrenta resultados financieros adversos.
YPF S.A., la petrolera estatal argentina, se encuentra en medio de una fuerte polémica ante la posibilidad de que sus ex ejecutivos reciban bonos extras en una Asamblea General Ordinaria y Extraordinaria programada para el 26 de abril. La convocatoria, que abordará los resultados financieros del ejercicio económico de 2023 y planes futuros, ha generado debate sobre la gestión y la transparencia corporativa.
Durante el año 2023, bajo la presidencia de Pablo González, la empresa registró pérdidas significativas, lo que ha puesto en tela de juicio la eficacia del management. A pesar de ello, la propuesta de asignación de remuneraciones al Directorio por un monto de $2.087.597.061 ha causado controversia debido a los resultados negativos.
Entre los ex ejecutivos de YPF se encuentran Pablo Iuliano, Alejandro Lew (CFO), Gustavo Medele (vicepresidente de Sustentabilidad), Gustavo Astie (Gerente de Negocios de Activos No Convencionales) y Santiago Martínez Tanoira (VP de Gas y Energía), quienes podrían recibir compensaciones económicas sustanciales si la asamblea lo aprueba.
La situación plantea un escenario en el que los ejecutivos podrían recibir bonificaciones sin una rendición de cuentas clara ante los accionistas. Además de la consideración de las remuneraciones, la asamblea abordará la elección de miembros del Directorio y de la Comisión Fiscalizadora, la determinación de su retribución y la designación del auditor contable externo para el próximo ejercicio.
Una de las discusiones clave será la dispensa de la oferta preferente de acciones a los accionistas en relación con los planes de compensación de largo plazo al personal, destacando la necesidad de equilibrar la motivación del personal con la equidad hacia los accionistas.
Fuente: NA