Sus declaraciones fueron como conclusión de la presentación del informe «Mapa tributario municipal sobre el comercio mayorista y minorista: la Tasa de Seguridad e Higiene» que confeccionó la CAC. En el mismo, analizó la evolución de la carga (de diversa denominación según la jurisdicción) en 30 municipios del país entre 2010 y 2023.

El estudio evidencia un aumento significativo en la carga tributaria ejercida por los municipios a través de la tasa sobre el sector comercial, con un aumento promedio del orden del 19,3% para los municipios que gravan el tributo mediante alícuota y del 125% para aquellos municipios que gravan mediante un monto fijo.

«Queremos que las provincias y los municipios dejen de gastar lo que no se tiene, porque al sector privado no se lo puede seguir exprimiendo», continuó Grinman.

Mapa tributario de la CAC

Con el relevamiento, la CAC solicita, entre otros puntos, que se evite la imposición sobre las ventas por transformar a la tasa en un verdadero impuesto y que las tasas municipales se adecuen a los principios constitucionales y legales (ley de coparticipación federal de impuestos y otras normas).

Daniel Calzetta, presidente de la comisión de Asuntos Impositivos, presentó los principales datos que arrojó el estudio: «La tributación municipal es creciente y cada vez toma la forma de impuestos encubiertos. La posición de la Cámara es que la tributación se tiene que reducir. El ajuste de los municipios no tiene que hacerse en base a incrementar tasas y crear impuestos que solo complican la actividad económica y el comercio».

Asimismo, hizo hincapié en una de los puntos más notorios del análisis: «En los últimos años la tributación sobre el sector mayorista ha crecido más que aquella sobre el sector minorista, lo que aumenta el efecto de piramidación que tiene este tipo de impuestos. Una manera de atenuar este efecto es gravar menos a las etapas iniciales del proceso»