En un extenso diálogo con Voz y Voto, el gobernador Martín Llaryora dejó numerosas definiciones sobre su rol en el escenario nacional y el plan de gestión que ya comienza a ejecutar en la Provincia.
La que pasó fue una semana de alta intensidad y fuerte protagonismo para Martín Llaryora. El Gobernador debió repartir tiempo y energía entre la caótica negociación por la aprobación de la “ley ómnibus” que condujo el Ejecutivo nacional con los gobernadores –donde fue uno de las voces más determinantes– ; y la apertura del año legislativo el jueves, en la legislatura Unicameral.
Allí, en su mensaje debut en esa cita, insistió en destacar su voluntad de “dar gobernaibilidad” a la administración de Javier Milei, pero se diferenció del libertario al trazar cada uno de los que serán ejes de su gestión. Sobre su rol en ambos escenarios, la relación con la Nación y sus principales planes para la provincia habló en extenso en la entrevista que concedió al programa Voz y Voto.
–La de los Gobernadores con Javier Milei es una relación que se presenta como complicada, ¿en qué estado está hoy? ¿Cómo la describiría?
–Estamos en un momento muy pero muy difícil de la Argentina. Aquellos que estuvimos en situaciones de crisis sabemos que hay que tomar decisiones, a veces difíciles, pero que es mejor tomarlas antes que esperar; porque después quizá ya es tarde. El Gobierno nacional ha emprendido un plan de reducción del déficit. Nosotros venimos acompañando. Ustedes me han visto estar en la primera reunión de gobernadores con el Presidente, queremos colaborar. Que Córdoba tenga superávit y una expresión productiva muy distinta al resto de otras provincias no significa que podamos desarrollarnos en toda nuestra magnitud si el país no se desarrolla. Eso lo tenemos claro. Nuestra intención es colaborar. Piensen que si hay ley (ómnibus) es porque hemos colaborado en la construcción del cuórum necesario.
–Pero dicen que para el tango se necesitan dos ¿Qué pasa con la Nación? Da la sensación de que no hay mucha voluntad de construir una relación positiva con los gobernadores…
–Queremos colaborar con la Nación. Esto significa ayudarla. Pero vamos a defender los intereses de Córdoba. Ayudamos cuando colaboramos con el cuórum y cuando decimos que “sí”; pero también cuando decimos que “no” a algunos temas que ya han fracasado en la Argentina. Porque defendemos la producción, el tejido productivo, las economías regionales. Hemos escuchado mucho que ‘Llaryora estaba en contra de las retenciones’ defendiendo a las economías regionales de Córdoba y el interior de Argentina. Pero no hay que vincular retenciones, en este caso, solamente al agro. Esta vez fueron a la industria, a la metalmecánica, a microeconomías regionales. Para mí gobernar es generar trabajo, y la defensa de nuestro tejido productivo es esencial. Entonces, el “no” a las retenciones no es una oposición al Gobierno, es una ayuda. Si uno va a la caída de 2001, el programa macro había empezado similar: bajar los déficit, estabilizar la economía y la inflación. El 2001 empezó en 1998.
–¿La Nación acepta el disenso? Hubo un comentario duro de Milei respecto de los gobernadores (dijo en off que los iba a “fundir”)…
–Esa sería otro tema. Pero vuelvo a la génesis del problema, no tenemos que equivocarnos nuevamente. Un plan fiscal tiene que contener un plan productivo. Podés achicar al Estado, pero vas a tener que recaudar. Si no tenés en vista un plan productivo, vas a fallar. Porque estos impuestos que le querías cobrar a las economías regionales, al campo, a la industria metalmecánica, el próximo año no los ibas a tener, los ibas a llevar a la quiebra, a que cierren. Cuando salí de la primera reunión con el Presidente lo dije: vamos a ayudar a cerrar el déficit, vamos a ayudar a la Argentina a salir adelante, pero les pedimos que tengan un plan productivo, porque nadie habló de producción y de generación de empleo.
–Usted habló de ”la paz de los cementerios”…
–Si querés, podés cerrar el déficit mañana cerrando todos los sectores productivos. Pero se mueren todos.
–Lo que era la “ley ómnibus” se quedó sin el paquete fiscal y además tiene muchas restricciones sobre privatizaciones, la fórmula para los jubilados y las facultades delegadas. ¿Qué va a recibir finalmente Milei? ¿La ley será un apoyo político simbólico al gobierno?
–Cuando uno presenta una ley tiene que saber qué es lo esencial de ese paquete. Acá, nunca supimos qué es lo esencial. Yo fui uno de los pocos, cuando se retiró el paquete fiscal, que dije que no lo sacaran todo, que dejen aunque sea una parte. ¿Por qué? Porque había una parte que a lo mejor no iba a ser votada por todos, pero que había que acompañarla. Estaba el blanqueo, por ejemplo, o la moratoria, Bienes Personales, las inversiones extranjeras, cosas que había que discutir. Era la posibilidad de un plan para altas inversiones con desgrabaciones e incentivos. Eso paraliza el país. ¿Por qué? Imaginen a alguien que iba a ser una inversión, y… va a esperar a que salga la ley, etc. Si querés solucionar el país con tremendo ajuste,no solo podés ajustar, sino que tenés que ir dando muestras de inversiones, de movilidad económica. Porque si no terminamos en la paz del cementerio. Creo que Argentina tiene todas las condiciones para salir adelante.
–¿Y qué va a terminar siendo la ley? ¿Qué tipo de ley va a tener?
–No sé… Las leyes que salen son las que uno puede conseguir. Recuerden que yo gobierno en minoría. Presenté un proyecto (suba de aportes personales) y lo tuve que cambiar de una sesión a la otra, pero claramente tenía viabilidad de poder ser acompañado. Yo sabía cuál era el punto central de la estrategia que presenté.
–¿Y en la Nación, no? ¿No percibe un plan productivo en el Gobierno. ¿Cuál es el plan?
–¿Ustedes vivieron alguna palabra de algún funcionario del Gobierno que hable de producción, de empleo, de trabajo? No.
CAJA DE JUBILACIONES
–Mencionó el tema de la Caja. ¿Hay ahí otro tipo de relaciones porque el titular de Anses es cordobés, Osvaldo Giordano, un hombre que conoce de primera mano el problema que tiene Córdoba para financiar el déficit. ¿En qué situación están?
–Se han llevado un funcionario de primer nivel. Pero claro, termina siendo alguien que depende de órdenes que tomen o el Presidente o el ministro de Economía. Claramente, él sabe y tiene toda la intención de regularizar la situación de Anses con las provincias. En el caso de Córdoba tenemos todos los números visados; o sea que simplemente es apretar una tecla y mandar la plata. La deuda y la cuota mensual, que no están mandando. Pero sería injusto cargar las tintas sobre Giordano en este tema porque sabemos perfectamente que no depende de él.
–¿El Gobierno nacional está frenando ese dinero? ¿No ha cambiado esa situación?
–No. Para nada. La situación no solo no cambia, sino que empeora. Porque cada vez se va generando una diferencia mayor y se va agravando. Pero hemos tomado medidas que nos han permitido reducir el déficit.
–Medidas fuertes…
–Cuando hablamos de la Caja, hablamos de los jubilados que fueron y serán los empleados de la Provincia. Lo que me parecía justo fue no recargar nuevamente con impuestos a los cordobeses, sino que seamos los activos (de la Provincia), a través de un descuento mayor, los que podamos bajar el déficit. Eso nos ha permitido bajar el déficit en algunos puntos sin perjudicar a los jubilados. En este caso, fuimos sobre los activos y pedimos un esfuerzo mayor. Aproveché un aumento, el de noviembre, para que no se viera una retractación. Hicimos dos cosas: un aumento para la Caja y uno para la obra social. No fue fácil. Pero mantener saneada la Caja es defenderla para los que se van a jubilar.
PARITARIAS Y UEPC
–Se renegoció, a partir de la disparada de la inflación, con 9 de los 10 gremios estatales. Pero los docentes no acordaron y es un conflicto abierto. ¿Qué salida puede haber? ¿Comenzarán las clases, lo puede garantizar?
–Ante un alza de la inflación y una baja de la recaudación tenés que llegar a un acuerdo colaborativo, que es lo que les planteé a todos los sectores. Me tocó otra veces, en crisis municipales, o con la pandemia. Es sentarnos con los sectores y poner los números con transparencia. Decir: “Esto es lo que está ingresando. Yo te puedo pagar lo que está ingresando y después, cuando mejoremos, compensamos”. Me senté con los sindicados sindicados, les puse cuánto es el recurso que tenemos y que cada uno lo reparta de la manera que quiera. Acá la mesa de diálogo está abierta. Estoy por hacer una reforma de trabajo con los docentes y con los municipios. Voy a poner plata para invertir en tecnología, en formación docente, vamos a seguir arreglando las escuelas. Estamos hablando de inversiones de más de 50.000 millones de pesos. Lo que necesitamos es ponernos de acuerdo, con sentido común y buena voluntad, sobre lo que podemos pagar, y que hay que esperar. Y que cuando esto mejore, recuperaremos lo que no se pudo ahora. Es lo que están haciendo todas las provincias en este contexto.
–¿Cuánto influye la nueva conducción de la Uepc en la dificultad de llegar a un acuerdo con el gobierno?
–No quiero sobre la mesa temas políticos que claramente muchos ponen en la mesa de discusión. Porque cuando uno ve que de 10 gremios distintos, entre los que está la sanidad, los empleados administrativos, Lotería, jerárquicos, con el único que no se pudo es con el de los docentes… Bueno, veremos qué dicen las maestras y las directoras. Pero muchos creían que como no habían firmado el acuerdo no les iba a depositar el aumento. No tengo ninguna mala intención, así que les deposité lo mismo que a los otros gremios.
–¿La Provincia puede poner en esa mesa de discusión, por ejemplo, un examen sobre el ausentismo? En diciembre hizo alusión sobre lo que pasaba en el sector Salud, en el que había un ausentismo mucho mayor que en el sector privado.
–Sí, pero estamos haciendo otras cosas. Una es una modificación muy pedida por los docentes, que era la posibilidad de tener más horas. Porque además, en muchas materias nos están faltando docentes. Tenemos la voluntad de avanzar, de construir en conjunto un acuerdo. Espero que se dejen posiciones ideológicas de lado o de sostener un conflicto para quedar bien con un sector político. En esta crisis, necesitamos estar todos juntos. A niveles nacionales nuestra escala salarial está entre las mejores en todos los rubros. Pero igual hoy es muy difícil poder empatarle a la inflación porque estamos llegando, como dijo el Presidente, a la estanflación, que es alta inflación y recesión. Como buen administrador que soy, no estoy en condiciones de darles más de lo que recaudo. Argentina va a salir, y cuando salgamos, recuperaremos el poder adquisitivo de los empleados públicos.
SOSTENER LA OBRA PÚBLICA
–En la Unicameral habló de mantener la obra pública, un tema esencial para muchos municipios. Habló de invertir 700.000 millones de pesos. Con la caída de la actividad y la recaudación, ¿dónde se va a obtener esa plata?
–Todavía hoy estamos con su superavit porque seguimos administrando responsablemente los recursos. Son el resultado de las decisiones que venimos tomando. Pero un municipio como la Provincia no pueden servir solo para pagar sueldos, tienen que tener capacidad para prestar servicios. En esa obra pública están la reforma y la construcción de los hospitales, la reforma y la construcción de escuelas, los caminos o las autovías que faltan terminar. Voy a hacer lo posible por sostener la obra pública porque es progresos y empleo. Y cuando pase la crisis, aquellos que pudieron sostener los planes de obra, se van a encontrar mejor parados para recibir inversiones y generar trabajo. Al Gobierno nacional le pido que no suspenda toda la obra pública. Si tenés una visión productiva tenés que saber qué sector querés promocionar y a qué sector le podés recargar impuestos. Y además, hay obras que no podés detener para mejorar el país. Por ejemplo, el gasoducto. ¡Eso no tendría que tener discusión!
–Para financiar la obra pública, ¿qué expectativa tiene con la Nación? ¿Qué necesita que haga?
–Me gustaría que la Nación se recupere lo más rápido posible y que cumpla con las obras que nos debe, y que nos pague lo de la Caja. Pero supongamos que eso no está. Bueno, hay plata internacional que la Nación tiene y que va dirigida a obras. Hay obras estratégicas que no tendría que cortar, y no hablo sólo de Córdoba. ¿Qué podría hacer la Nación si no puede prestar ni ayudar? Que no te obstaculice para pedir crédito. Yo, que he recorrido muchos lugares para negociar la deuda, antes de la ciudad y ahora de la Provincia, vi que Córdoba está mirada distinta a la Argentina. Porque Córdoba nunca cayó en default. Porque revisan qué hicimos como administradores, me vieron tomar una ciudad como Córdoba que estaba totalmente endeudada, renegociar la deuda, mejorar la administración y pagar intereses. Vieron como actuó este Gobierno provincial para llegar al “récord financiero”, como le dicen. Tenemos mercados abiertos en el mundo que a Córdoba le prestarían plata y que podemos destinar para hacer obras. La Nación, lo único que tiene que hacer es firmarnos el aval y no obstaculizar. Y ahí veremos. Y además, tenemos que salir a buscar financiamiento para pagar también nuestros compromisos.
DEUDA Y FINANCIAMIENTO
–¿Piensa tomar deuda para cumplir con la deuda que tiene Córdoba en dólares? ¿Está trabajando en eso?
–Sí. Es lo que le está pasando a todas las provincias y al país. Nosotros hemos pagado los últimos intereses con dólares genuinos, productos del ahorro. El país está en dificultades a veces hasta para venderte dólares y pagar las deudas.
–Incluso Córdoba no podía acceder al Mercado de Cambios, ¿en qué quedó eso?
–Exacto. Para no confundir, hemos pagado con dólares propios; pero al valor dólar, como se ha disparado, necesitamos ir al mercado. Es lo que están haciendo otras provincias. Buscás plata para pagar, refinanciás o buscás algún otro elemento. Qué estamos esperando ahora, y se lo planteamos a la Nación: queremos saber cuál va a ser la estrategia que va a tener para el endeudamiento de Nación y de las provincias. Es mejor seguir esa estrategia para ayudar a la Argentina. Y en el mientras tanto, vamos cumpliendo. Pero, que le digan a las provincias cuál es el camino, para también ayudar y no obstaculizar las negociaciones que tiene que hacer la Argentina con el resto del mundo. Porque imaginen lo que sería una provincia que no puede cumplir. Sería una mala noticia para la Argentina. Por eso, estamos ayudando. En la situación en la que estamos, fuimos y cumplimos nuestra deuda; fuimos y acompañamos el Gobierno en la institucionalidad; fuimos y dimos cuórum. Ahora, también ayudamos cuando te decimos “no”. Si eso no es ayudar, ¿qué es? Y además, los días son muy importantes. No es lo mismo aplicar una medida dentro de un mes porque el desgaste social corre. Y cada día se vuelve más duro.
–¿Hasta cuándo sostendrán los gobernadores esa actitud?
–Yo la voy a sostener siempre. Pero lo que pasa no afecta solo a la Nación o a las provincias en sus recaudaciones. Afecta a la producción. Porque alguien que esté esperando una ley para invertir, hasta que no salga, no invierte.
–¿Qué se apruebe la “ley ómnibus” va dar algo de certidumbre a nivel político para que el país se empiece a calmar un poco en la discursión?
–Ojalá. Que se apruebe la ley también es importante para fuera. La imagen de todos los gobernadores con el Presidente también fue muy importante. Lo que hicimos ahí fue ayudar, todos los gobernadores de distintos signos políticos. No tengan duda de que eso lo ayudó a Milei en toda este etapa. Hacia afuera va a quedar que Argentina pudo aprobar en el Congreso una legislación. Y es algo importante.
“QUIERO DESCENTRALIZAR EN SEGURIDAD, SALUD Y EDUCACIÓN Y DAR MÁS PODER A LOS INTENDENTES”
–En la Unicameral le habló mucho a los intendentes, en quienes descentralizará tareas. Dijo que ya son 26 los que quieren tener guardias urbanas, ¿cree que los municipios van a tener capacidad de asumir esos desafíos?
–Todas las ideas que estamos trayendo se aplican en un montón de países a los que les va mucho mejor que nosotros. Donde muchas de las cosas están en manos de los intendentes. Quiero decir que no los he municipalizado, siguen siendo provinciales y el intendente que quiera sumarse…
–¿No es sacarse de encima responsabilidades provinciales?
–No, no. Todo lo contrario. Vamos a seguir haciendo lo que venimos haciendo y además, reformas. Lo que hacemos es darles una caja de herramientas que el intendente puede usar. Yo he sido intendente dos veces, de San Francisco y de Córdoba. Fui el primero en tener una mesa de política educativa. Llegué a tener 36 planes educativos en San Francisco. Para el ministerio de Educación, un chico es un expediente. Para el intendente, es Juan, el hijo de Margarita. Tenemos 427 ciudades. La realidad educativa cambia todos los días. Hoy, el intendente no sabe esa realidad. Pero cuando se sume a este programa va a saber porque la tenemos digitalizada: va a saber cuánto es la deserción en su ciudad, quiénes desertan, cómo está su ciudad comparada con otras, cómo está cada una de las escuelas y cuál es el nivel. Y va a poder modificar su plan educativo, para que tenga una realidad con la vision productiva de su pueblo.
–¿Esos cambios de materias se van a aplicar en el ciclo escolar 2024?
–En este año también. Cuando me permitieron aquella mesa en San Francisco, teníamos horas libres. Planteé que en esas horas hicierosn otras cosas y el municipio pagara los profes. Así, les dábamos a los chicos un mejor programa. O armamos competencias estudiantiles sobre interpretación de texto, etc. Lo que hago ahora en la Provincia en seguridad, salud y educación es una descentralización y desburocratización. Es dejarles que tomen decisiones a los que están en el territorio, que tengan flexibilidad y que puedan hacer modificaciones. Y yo sigo teniendo responsabilidades y sigo poniendo los recursos. En los hospitales lo mismo. Voy a poner 7.000 millones de pesos en 44 hospitales, para que larguen con casi 50 millones de pesos. ¿Se rompió la ambulancia? ¿Qué hacemos, no trasladamos a nadie? No, ahora el director va a tener fondos, contratará otra ambulancia y trasladará al paciente. Y se acabó. Eso es operatividad, descentralización. Ya lo hice en Córdoba con los centros operativos. Es la misma lógica.
.–Dijo que en Salud hay alto ausentismo, ¿por qué hasta este momento no se controlaba eso?
–Estamos usando ahora elementos tecnológicos, cambiando el paradigma, empoderando a los directores porque le damos funciones. Ahora, como director, vas a poder administrar tu organigrama. Hay algunos hospitales que tienen más gente que el municipio porque son regionales. Administrar uno es casi ser un intendente. No tenían facultades para sancionar, para controlar. Yo les voy a sostener la cantidad de recursos, así que si uno se jubila, puede tomar otro, o si uno no cumple, lo puede sancionar y tomar otro. Además, podrán modificar la orgánica y tendrá plata para poder hacer arreglos. Y la facturación del hospital, que antes era 70-30: 70 para la Provincia y 30 para el hospital, ahora, 70 quedará en el lugar y 30 irán a la Provincia, y después con eso se hará un fondo de cooperación para otros hospitales. Y en seguridad es lo mismo. Vamos a ayudar y fortalecer. Muchos intendentes ya tienen guardia urbana. Pero les falta capacitación, o les falta apoyo económico, auxiliares de la Justicia o armas no letales. Además, crearemos las fiscalías antinarcóticos, más efectivos para la Policía antinarcótico, y esta semana presentaremos 270 guardiacarceles.
–¿Cuántos municipios les gustaría que se sumaran a la ley de seguridad este año?
–No, no sé. Hoy son 26 y 14 en proceso. Pero si lo ves por población, como está la Capital, ya es más del 50%. Muchos intendentes en su plan de gobierno han puesto la seguridad como eje, porque ya han resuelto otras cosas.
–¿Cuándo habrá fuerzas privadas actuando en el nuevo esquema de seguridad?
–Ahora hay todo un trabajo para vincularla y coordinarla. La ley ha permitido modificaciones y van a empezar a ocupar lugares. Un intendente puede, en vez de contratar algún empleado para su fuerza de seguridad, contratar a un servicio de seguridad privado que patrulle o haga de guardia urbana, y trabaje en conjunto con la Policía. Así, al tener más fuerzas también evitas lo que técnicamente le dicen “huecos negros”. Bueno, en Córdoba vieron que nos hemos destacado internacionalmente por la actuación frente al crimen organizado internacional como lo fue el caso del narcotraficante Fito Macías. Eso muestra cuál es la voluntad de Córdoba y de Argentina, que es la pelea contra el narcotráfico.