No existe el delito de opinión en la Argentina y no se entiende de qué modo afectaría una repartición municipal específicamente abocada al tema minero el desempeño de la empresa, salvo que ésta se considere, como parece ser, eximida de cumplir con leyes y regulaciones.
El intendente de Fiambalá, Raúl Úsqueda, enfrenta a la litífera china Zijin-Liex si el respaldo institucional de su partido, la UCR
En el caso de Fiambalá y los radicales se suma el hecho de que los despidos contragolpearon la iniciativa de un intendente del radicalismo con un agregado para nada menor: Úsqueda se propone instrumentar un modelo de relación con las mineras diferente al que llevó adelante su antecesora, que respondía con pelos y señales al del Gobierno.
Recuperada para el radicalismo por un dirigente joven, Fiambalá podría convertirse en una oportunidad para que la UCR exhiba con hechos qué política minera llevaría adelante en caso de acceder al poder.
Una gestión en tal sentido sería tal vez más convincente para el electorado que el jarabe de pico, y además contribuiría a diluir sospechas de componendas con el oficialismo como las que se extendieron cuando los cargos que ofrece el Gobierno a la oposición en la CAMYEN se mezclaron en las frustradas tratativas por la reforma constitucional hace un par de meses.
A diferencia de los radicales, el peronista disidente Hugo Ávila advirtió en el acto este potencial y se posicionó antes que nadie. Incluso se apersonó en el lugar del conflicto y apuntó los misiles sin trepidar sobre el Gobierno y la empresa, con información precisa.
Si de sus correligionarios depende, Úsqueda parece estar solo en la pulseada, pero el episodio que protagoniza trasciende su peripecia y la del partido desertor. Expone a una oposición carente de vocación de poder, más entusiasmada y enérgica para librar sus batallas intestinas que en la búsqueda de ampliar su una representación que le permita emparejar cargas con el Gobierno que la apabulló en octubre.
Un radicalismo cuyos dirigentes, en definitiva, no consiguen cubrir el vacío que dejaron los líderes que lo mantuvieron durante 20 años en el Gobierno provincial- EL ANCASTI