Así lo anunció esta mañana el intendente Federico Susbielles, quien sostuvo que «es un día de satisfacción rodeado por grandes empresas que, ante la convocatoria, tuvieron una gran predisposición para poder trabajar en equipo conjunto».

«Se va a generar un fondo extraordinario inicial de 9.273 millones de pesos que va a ir aplicando a cinco líneas específicas», añadió en una conferencia de prensa junto a los representantes de las empresas, donde hizo hincapié en las viviendas y recordó que «12.000 casas han tenido voladura de techos y 300 se han derrumbado».

Susbielles enumeró los restantes ejes de acción: el plan de reforestación integral, en el que estimó en 14.000 la cantidad de árboles perdidos tras el temporal; las entidades deportivas, civiles y culturales derrumbadas que «se van a reconstruir»; las instituciones escolares de la ciudad (el gobernador bonaerense Axel Kicillof «ha generado un fondo especial de emergencias para reparación de escuelas»); y finalmente, el programa para la seguridad alimentaria.

En plena reconstrucción, el Tren Solidario arribó esta mañana a la localidad bahiense con más de 7.500 kilos de alimentos que serán destinados a los damnificados por el temporal.

Se trata de la 49na. cruzada solidaria de esta especial formación ferroviaria, que lleva alimentos no perecederos, prendas de vestir, agua mineral y elementos de limpieza, que serán distribuidos en comedores escolares, hogares e iglesias afectadas.

Por otro lado, al día de hoy el 90% de los usuarios ya recuperó el servicio de energía eléctrica, que se encontraba interrumpido desde la tormenta.

La Empresa Distribuidora de Energía Sur (EDES), prestataria del servicio, señaló que «las obras continúan enfocadas en recuperar los daños más complejos de aquellos casos puntuales donde la red esta extremadamente afectada».

Según se indicó, más de 450 personas, movilizadas en 102 cuadrillas, continúan reconstruyendo el sistema, llevando adelante más de 800 obras sobre los más de 2.795 kilómetros de redes, entre tendidos troncales y domiciliarios, que se vieron afectados por la caída de gran cantidad de árboles, techos, ramas y estructuras