La secretaria de Energía, Flavia Royón, detalló que desde Nación trabajan en una modificación del actual sistema tanto para crudo como para gas. Las empresas productoras piden autorizaciones de mayor plazo para mejorar el precio del petróleo y disminuir el costo de los fletes.
El engrosamiento de las exportaciones de petróleo y su sostenimiento en el tiempo desde hace más de un año y medio, llevó a que sean varias las empresas productoras que comenzaron a reclamar que los permisos de exportación que da el gobierno nacional sean por un plazo más extenso.
El actual andamiaje normativo marca que los permisos, en el caso del petróleo, se dan cada 30 días. Un punto que desde las empresas, se asegura que juega en contra de los precios finalmente obtenidos.
Según explicaron, al ser permisos dados con tan poco plazo por delante no solo se obtiene un precio más bajo por los barriles exportados, sino que también no se puede acceder a un sistema de transporte más económico, ya que solo se los puede contratar “sobre la marcha”.
La secretaria de Energía de la Nación, Flavia Royón, detalló que el pedido ya tuvo eco en el gobierno y aseguró: “estamos trabajando en eso”.
Según contó, “con el aumento de producción en Argentina, y en particular en Vaca Muerta, aspiramos a poder dar un salto exportador tanto en gas como en crudo. Y para dar ese salto estamos en conversaciones también con Chile y con los países para poder dar certidumbre y poder invertir en mayor infraestructura está en carpeta y estamos conversando los temas normativos para poder dar permisos de exportación de más largo plazo”.
La extensión llega al gas natural
Esas negociaciones no solo se centran en el petróleo sino también en las exportaciones de gas natural. “Con Chile estamos teniendo un trabajo bastante articulado para dar permisos de largo plazo también en materia de gas, pero todavía estamos en trabajo y en conversación”, contó Royón.
Hace un mes el gobierno extendió por resolución el plazo de autorización de las exportaciones de petróleo hasta un máximo de un año, pero solo para el crudo enviado por oleoducto.
La aspiración de las productoras es que esa medida se extienda al crudo exportado por barco que el año pasado superó los 24 millones de barriles.