Rosario. El Concejo reinstala la idea de prohibir el accionar de los cuidacoches

El lunes recibirán en la comisión de Seguridad a vecinos de la zona del Monumento que fueron amenazados por trapitos

Por Tomás Barrandeguy  – La Capital – Foto: Celina Mutti Lovera / La Capital

Un sector de la oposición en el Concejo volverá a la carga para pedir que se prohíba el accionar de los cuidacoches en los sectores donde esté establecido el estacionamiento medido. Es más, el lunes próximo, los integrantes de la comisión de Seguridad recibirán a vecinos de la zona del Monumento Nacional a la Bandera que aseguran ser hostigados por cuidacoches de la zona. Tras esa reunión, se presentará un proyecto para avanzar sobre la prohibición. De todos modos, aclararon que para eventos especiales se pueden hacer excepciones a partir de experiencias que ya se ejecutaron, como los “estacionamientos controlados” durante la última Fiesta de Colectividades.

El pedido de prohibición comenzó a darse hace algunos días, cuando durante la apertura del período legislativo en el Concejo, el edil de Juntos por el Cambio Carlos Cardozo planteó el debate sobre el tema, que se da cada año. Este no fue la excepción, ya que con el reinicio de los encuentros de las comisiones, desde diversos sectores se mostraron contrarios a esta postura y plantearon la regulación de la actividad.

En esa oportunidad, el concejal planteó prohibir los trapitos y citó el Código de Convivencia para reclamar que el intendente Pablo Javkin “lo aplique. El artículo 300 prohíbe la extorsión en la vía pública, tanto de trapitos como de limpia vidrios. Llegó el momento de hacerlo cumplir”, enfatizó.

“No podemos permitir que los rosarinos sigan rehenes de estos individuos, que muchas veces organizados, se han vuelto amos y señores de la vía pública. Allí tiene que estar el Estado, tiene que estar el municipio controlando y, en conjunto con las fuerzas, apresando a quienes realicen esta actividad extorsiva”, añadió el concejal.

En diálogo con La Capital, Cardozo expresó: “Nosotros seguimos sosteniendo que en las zonas donde haya estacionamiento medido hay que prohibir la actividad”. Puntualmente, señaló que “se han dado varios hechos donde pedimos intervención fuerte por parte de (la Secretaría de) Control y la Policía, como en la zona de Rioja y 1º de Mayo. Lamentablemente, en las últimas semanas se ha descontrolado, aunque ahora está más tranquilo”.

A raíz de diversas situaciones que se vivieron en la zona, los concejales de la comisión de Seguridad recibirán a los vecinos el lunes en su encuentro semanal. Cardozo aseveró que, tras la reunión, presentarán un proyecto para prohibir la actividad de los cuidacoches en las zonas de estacionamiento medido.

El edil macrista detalló además que “la zona del pasaje Simeoni es otra que, lamentablemente, se puso complicada y que de alguna manera ratifica que en los sectores donde hay estacionamiento medido y de nocturnidad fuerte, como Pichincha o el Monumento, la única salida es prohibir (la actividad)”.

Eventos masivos

La iniciativa plantea un panorama restrictivo casi en su totalidad, pero para eventos especiales sus impulsores admiten que «se pueden explorar otras posibilidades”.

Como ejemplo, citó la modalidad que se dio durante la última Fiesta de Colectividades, cuando el Concejo aprobó un proyecto de “estacionamiento controlado”. Fue una experiencia en la que se cobró un costo fijo de alrededor de 300 pesos y en la que todo lo recaudado se destinó a hospitales municipales y personas que trabajaron en el lugar. La iniciativa fue de Cardozo y de la concejala socialista Verónica Irizar.

Sobre esta posibilidad, el concejal manifestó: “Se puede lograr, armando operativos donde haya espectáculos masivos, como en la zona del parque Independencia o del anfiteatro”. Sobre esta última zona, el edil aseguró que desde su bloque tomaron reclamos de los vecinos porque durante el recital que dieron Los Palmeras el viernes pasado, “se puso una tarifa fija de 500 pesos y pasó algo que amerita intervención del municipio y la policía, ya que le cambiaron la mano a Chacabuco, desde 9 de Julio a Montevideo, para que en lugar de ir hacia el norte, fuera hacia el sur”.

“Cualquier intento de regulación en estas zonas no tiene sentido, es una utopía; sí se puede avanzar sobre situaciones especiales, como Colectividades. Pero naturalizar ciertas situaciones, no”, concluyó.

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