Entrevista a Alex Valdéz
El ex director de Hidrocarburos de la provincia de Neuquén habló sobre la necesidad de acelerar el proceso de crecimiento de Vaca Muerta, y de revertir el declino de los convencionales.
Alex Valdéz es Ingeniero Industrial Químico, egresado en la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional del Comahue. Desde 1986, desarrolló sus actividades en el sector hidrocarburífero de la Provincia del Neuquén, participando como representante provincial en la Organización de Estados Productores de Hidrocarburos (OFEPHI).
Desde 2008, fue director provincial de Hidrocarburos de Neuquén hasta noviembre de 2019, y representante en el Directorio de Hidroeléctrica El Chocón S.A, cuyo mandato termino en marzo de 2020. Integró el gabinete del Gobierno de Jorge Sapag.
En estos 37 años de actividad fue testigo y protagonista del proceso de evolución que vivió Vaca Muerta y el crecimiento de los no convencionales: desde el contrato entre YPF-Chevron allá por julio de 2013 que fue la punta de lanza para el desarrollo del shale en Argentina, pasando por el hallazgo de Fortín de Piedra; la llegada de más inversores; el cambió en el diseño de pozos que permitió mayores cantidades de etapas de fractura, hasta el salto de productividad actual.
En diálogo con Mejor Energía, el ex funcionario habló sobre el presente y futuro de Vaca Muerta, de la necesidad de acelerar el proceso de expansión para monetizar las reservas, y de las cuentas pendientes en el terreno de los convencionales.
“Hoy se está explotando alrededor del 6% de Vaca Muerta, es apenas la punta del iceberg de lo que tenemos por delante”, aseveró.
Y sostuvo que “con las inversiones actuales y nuevas ampliaciones en infraestructura no alcanza y que se van a requerir nuevas obras para llegar con el gas a los mercados de exportación”.
Valdéz se refirió puntualmente a las obras de mayor envergadura que necesitan de importante financiamiento, como el caso de una planta de licuefacción, un proyecto que demandaría una inversión de más de U$S 15 mil millones, además de los U$S 7 mil millones previstos para incrementar la producción anual de shale.
En su etapa como director de Hidrocarburos de la provincia de Neuquén, durante el gobierno de Jorge Sapag, recordó que los comienzos con Vaca Muerta allá por 2007 no fueron nada fáciles.
“Había que evangelizar al Gobierno Nacional y a gran parte de la industria y dar a conocer lo que representaba Vaca Muerta. En 2010 cuando se empezó a trabajar con equipos de fractura en Argentina casi no se conseguía ninguno. Fue un proceso que llevó tiempo y esfuerzo”, comentó.
Y agregó que “la explotación no convencional requirió un mayor seguimiento de parte de la provincia, lo cual obligó a realizar mayores trabajos de gabinete, a los efectos de ir conociendo los resultados que obtenían”.
En ese sentido Valdéz, destacó que “a medida que avanzó el desarrollo de Vaca Muerta, sobre todo a partir de 2015, momento en que se cambió el diseño de pozos. Se volcó a la perforación de pozos horizontales que alcanzan mayores longitudes, permitiéndose así realizar mayores cantidades de etapas de fractura”.
Las actuales restricciones en el transporte en Vaca Muerta fueron anticipadas y advertidas por el gobierno de Neuquén.
“Hay que evitar cometer los mismos errores en el futuro. Hubo alarmas en el segmento del gas que se observaron a partir de finales de 2016. Fortín de Piedra pasó a producir 18 millones de metros cúbicos de gas en apenas dos años. Se veía venir una etapa de fuerte crecimiento en Vaca Muerta con un gran salto de productividad”, explicó.
No obstante, Valdéz atribuyó la falta de decisiones a razones políticas y de desconocimiento.
“A veces cuesta hacerle entender al Estado Nacional lo que Vaca Muerta necesita en cuanto a beneficios fiscales, impositivos, incentivos a inversiones, importación de insumos estratégicos para la industria, acceso a divisas, etc. El gobierno provincial debería reclamar más estas cuestiones a la Nación”, advirtió.
Y enfatizó que “la dirigencia política, gremial y empresarial deben estar a la altura de la calidad de nuestros recursos. Hoy el desafío es acelerar el crecimiento de Vaca Muerta y revertir el declino de los yacimientos convencionales, cuya producción está cayendo todos los meses y que requiere de una urgente reactivación por parte de la Nación y los gobiernos provinciales para evitar problemas futuros”.
Y remarcó: “En el convencional a nivel nacional necesita una inyección inmediata de claridad en las medidas de parte del gobierno nacional, en colaboración con las provincias, de manera de frenar el declive. Pues de no ser así, en los próximos años, 3 a 5, estaremos lamentando el terreno perdido, por lo cual se hace necesario un urgente trámite para encontrar alternativas de mejoras”.
En cuanto a la exploración offshore frente a las costas marplatenses, afirmó que se necesitan quizás 5 a 8 años como para iniciar una etapa de explotación
Hacia el corto y mediano plazo, Valdéz consideró que “el aprovechamiento del recurso hidrocarburífero será exitoso si se toman las decisiones que incentiven las inversiones, por ejemplo: ampliar o construir nuevos ductos en línea con la producción futura de Vaca Muerta; mejorar los procesos de importación de materiales destinados a la explotación de convencionales y no convencionales; mejorar o construir nuevos caminos o rutas; definir la puesta en marcha del tren para aquellas rutas que sean necesarias; incentivar construcción de plantas especiales como para extraer componentes ricos del gas, entre otros proyectos”
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