EL ÚNICO MUNICIPIO MINERO COMANDADO POR UN INTENDENTE OFICIALISTA

En la recta final de cara a las elecciones del domingo, el Gobierno reforzó su presencia en el municipio de Fiambalá, con la intención de revertir los resultados de las PASO, donde la intendenta Roxana Paulón quedó detrás de los postulantes de Juntos por el Cambio. El propio gobernador, Raúl Jalil, se puso al frente de esta estrategia política visitando el distrito en más de una oportunidad en las últimas semanas.

La decisión del Gobierno de incrementar su trabajo proselitista en ese distrito tiene una razón concreta: seguir manteniendo el control del único municipio minero que responde al oficialismo. Es que, hasta la fecha y aparte de Fiambalá, todas las intendencias mineras son comandadas por intendentes radicales, a los que el Gobierno debe sentar en la mesa al momento de las negociaciones con las firmas mineras. Estos municipios son Belén, Antofagasta de la Sierra, Andalgalá y se podría sumar Ancasti, que en el último tiempo estuvo envuelto en una polémica, cuando su intendente, Rodolfo Santillán, denunció que se empezaron a realizar trabajos para una futura explotación de litio sin el consentimiento de los vecinos.

En Fiambalá se encuentra el proyecto minero “3 Quebradas” operado por la firma china Liex-Zijin que no estuvo exenta de polémicas por irregularidades en la facturación de maquinaria y más recientemente por el trato que mantendría a empleados agremiados en la OUCRA a cargo de las obras del complejo donde funcionará. Es por eso que para el Gobierno es fundamental seguir manteniendo un intendente de su signo político.

Ante este panorama generado por las PASO, el Gobierno bajó todo su arsenal para intentar mantener en la intendencia a Paulón. Lo hizo con el anuncio de obras, entrega de viviendas y la puesta en marcha de diferentes programas. La jugada le valió en los últimos días una denuncia de la oposición contra Paulón y contra el propio Gobernador. La presentación fue realizada por los apoderados Luis Lobo Vergara y Ezequiel Stern, al tomar conocimiento por medios de comunicación locales de que hoy el Gobernador visitaría Tinogasta para entregar “beneficios del programa PROCANOR a 300 productores viñateros de Fiambalá”. Ante esta presentación, el Gobierno suspendió el acto y la demanda quedó sin efecto.

Ésta no es la primera vez que el Gobierno sale al rescate de Paulón ante una mala performance electoral en las PASO. Ya lo hizo cuando la intendenta fue a la reelección en 2019, cuando perdió en la primaria pero logró mantener la conducción del municipio por solo 11 votos.En las PASO de agosto de este año, los precandidatos de Juntos por el Cambio cosecharon un total de 2.764 votos frente a los 1.994 que obtuvo Paulón de Unión por la Patria. En la interna opositora se impuso Raúl Úsqueda contra Bernardo Quintar.

Última recorrida

En el marco de esta estrategia, el Gobernador cerró ayer la campaña en el oeste provincial justamente en Fiambalá. Primero visitó junto a Paulón el progreso de la obra del puente sobre el río Abaucán en la localidad de Medanitos. Por la tarde, encabezó un acto político para respaldar la re-reelección de la intendenta. En el acto, Paulón agradeció a Jalil al afirmar: “Los fiambalenses le debemos mucho (al Gobernador), porque con su mirada le ha dado impulso a Fiambalá. Esta gestión municipal y provincial lo que va anunciando se ejecuta».

Más adelante, apuntó contra la oposición en el distrito. “Los mismos que hoy se rasgan las vestiduras son los que acordaron conmigo en 2019. Son los que hicieron perder a Bernardo (Quintar)”, dijo.

Jalil, por su parte, elogió la gestión de la intendenta Paulón y valoró «el crecimiento» del distrito. «En Fiambalá, el futuro es hoy, está en la agroindustria, el turismo y la minería con un control ambiental, social y económico», manifestó en diálogo con la prensa local