Enero arrancó con un 35% arriba en la búsquedas de alquileres, según la inmobiliaria Remax. La actividad de Vaca Muerta genera demanda con precios volátiles.
El fenómeno está atado también al crecimiento de la construcción en Neuquén, sobre todo en la ciudad capital. Hay una gran demanda de alquileres y la ciudad se convirtió en un faro laboral alrededor del shale, que mueve los engranajes de otros sectores de la economía.
Los ahorristas en dólares, y con los precios actuales, tienen la posibilidad de volcarse al negocio inmobiliario que derrama de la economía petrolera y hay dos fenómenos que suceden: uno es la suba de la demanda de casas de alquiler y, el otro, la compra de propiedades viejas, bien ubicadas, para hacer edificios o departamentos.
“Neuquén es la ciudad principal que recibe el gran movimiento y si bien Añelo es la localidad más plantada, el desarrollo de esa ciudad que es más chica, por sus posibilidades de crecimiento, no puede contener el movimiento”, indicó el operador inmobiliario.
Remax tiene al menos el 25% del mercado inmobiliario en la región y los indicadores dibujan una tendencia de hacia dónde va el mercado en relación con el fenómeno petrolero.
Lo que sucede en la provincia de Neuquén con el faro e Vaca Muerta es inversamente proporcional al fenómeno en otras zonas hidrocarburíferas. Por caso, la provincia de Chubut, que dejó hace un año y medio el podio de la producción petrolera, que hoy lidera Neuquén, desde las entrañas de Vaca Muerta.
En Comodoro Rivadavia, por ejemplo, de acuerdo a fuentes consultadas por +e, algunas empresas de servicios están migrando al territorio neuquino del sale. Y eso implica un movimiento de personas –por ahora no cuantificado- que infla y desinfla el mercado inmobiliario, en las dos zonas.
“La ciudad de Neuquén tiene un movimiento importante, hay mucha búsqueda de alquileres. En enero venimos con una gran demanda en las búsquedas y hay una disparada fuerte con respecto a diciembre”, dijo López, en relación al comienzo del año en términos de operaciones.
Sostuvo que de diciembre a enero el incremento en el flujo de búsquedas fue de un 35%, algo que fue atípico.
“Históricamente los meses más bajos forman parte del primer trimestre y este mes tenemos un salto fortísimo. Sobre todo, en alquileres no tanto en compra de propiedades”, dijo el bróker inmobiliario, que no dudó en relacionarlo con el empuje que tiene la provincia por el desarrollo del shale.
Dijo que la provincia de Neuquén es “netamente receptora de gente de otras provincias” y el fenómeno infla la demanda, que a su vez empuja el ciclo de la construcción de más departamentos. Esta rueda lleva a encarecer los precios de los inmuebles.
“Neuquén es una receptora neta de todas las provincias que vienen a vivir. No lo tenemos objetivamente medido, pero claramente hay una mayoría de gente que viene de las grandes ciudades, como Rosario, Córdoba o Buenos Aires”, subrayó.
Y acotó: “Hay muchas personas que vienen buscando un nuevo porvenir y también profesionales con especialidad que son traídos por las operadoras, que van a busca personal específico”.
López indicó que el mercado inmobiliario, por el boom petrolero estuvo distorsionado en algunos segmentos, sobre todo en la venta de propiedades. Un ejemplo de ello es el altísimo valor en dólares que los dueños piden por casas que no las terminan vendiendo en los plazos previstos. Incluso, no las venden por muchos años.
“Las casas suburbanas tienen un valor menor y la gente que tiene la posibilidad de hacer ese tipo de operaciones, busca precios. Todo se vende a valor de mercado, no hay mayor problema; con Remax lo que hemos logrado es que se revierta esa tendencia de que algunas propiedades lleven años sin venderse». No es que tengan demanda, sino que no tienen el precio correcto”, indicó López.
En ese sentido sostuvo que por la gran demanda que hay, debido al remate de dólares por parte de algunos clientes, y el boom de la economía petrolera, la inmobiliaria se puso un objetivo de vender una propiedad en un plazo no mayor a 110 días.
“Las empresas delegan en sus empleados la búsqueda de casas. Son las mismas personas las que buscan alquileres. Respecto a las búsquedas es bastante piramidal, hay una mayor búsqueda de alquileres en los más precios bajos, entre los 80 y 120 mil pesos, y va subiendo de acuerdo los lugares ejecutivos”, deslizó.
Respecto al valor promedio de la venta de propiedades y terrenos, apalancados por la disponibilidad que dólares que hay en el mercado por el flujo de inversiones petroleras, indicó que el ticket promedio que tiene Remax es de 25 millones de pesos en cada operación. Esto implica que se realizan operaciones de venta desde 1 millón de pesos de lotes, hasta 50 millones en algunas propiedades.
“Vamos aumentando el volumen de operaciones, nos metemos en un segmento de propiedades de más valor. Tenemos una oficina en Comodoro Rivadavia y hay algunas operaciones, pero no veo un movimiento fuerte de migración para acá todavía”, concluyó.