Para el 2023, el Impuesto Inmobiliario Rural de Córdoba tendrá un incremento promedio del 59 %. Seguirán vigentes las valuaciones del 2020 y se contemplarán distintos beneficios a la hora del pago.
Resulta obvio inferir que los campos de más de 200 hectáreas, o sea, el tercer escalón de la segmentación que se aplica desde hace algunos años, pagarán, por cierto, incrementos mayores a esa media, como ha ocurrido en ejercicios anteriores.
Es pertinente tener en cuenta el adverso clima macroeconómico que enfrenta la Argentina con una inflación que, según las proyecciones, llegaría este año al 95% o a más del 100%.
La segmentación
Cabe recordar la segmentación que se resolvió aplicar en 2018 en tres categorías:
-Grupo 1, Pequeños, de menos de 50 hectáreas. Para las autoridades representan el 67%.
-Grupo 2, Medianos, de 51 a 200 hectáreas. En la versión oficial suman el 22% de las propiedades.
-Grupo 3, “Grandes”, de más de 200 hectáreas. Según los registros del gobierno son el 11% de los campos, un porcentaje que parece bajo.
Inmobiliario Urbano y Automotores
Los aumentos en el Inmobiliario Urbano y en el Impuesto Automotor serán del 44% promedio y 49% promedio, respectivamente.
Los nuevos parámetros impositivos para el año que viene, se conocieron durante la presentación oficial en la Unicameral del Proyecto de Ley de Presupuesto 2023 que estuvo a cargo del ministro de Finanzas, Osvaldo Giordano.
De acuerdo a la exposición del titular de la cartera de Finanzas provincial, en cuanto al inmobiliario rural regirán las valuaciones de 2020, pero el incremento promedio rondará el 59% en 2023.
También, se informó que continuará la segmentación en tres grupos teniendo en cuenta la cantidad de hectáreas y la valuación. También se mantendrá el premio por pago electrónico a quienes realicen Buenas Prácticas Agropecuarias y/o estén cumpliendo con el Plan Provincial Agroforestal.
El incremento en el tributo a la tierra había sido adelantado a la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias de Córdoba (CEEA) en un primer borrador que Giordano les había presentado a los dirigentes en octubre pasado.
Según expresó el funcionario, las subas impositivas están “enmarcadas dentro de la ley de responsabilidad fiscal, que son las pautas que fija el gobierno nacional. De esas variables la más importante es la inflación que está proyectada para el año que viene en el orden del 60%”. Aunque las estimaciones de consultoras privadas proyectan que este año cerraría en un 95 % y también hay algunas que le hacen atravesar la línea del 100%.
Otros impuestos
Además del incremento contemplado para el Impuesto Inmobiliario Rural, también se vienen aumentos para los demás impuestos patrimoniales de cara al 2023.
En este sentido, para el Impuesto Inmobiliario Urbano se contempla un aumento promedio del 44%, al tiempo que se mantendrán las mismas valuaciones fijadas en 2020. Se mantendrán también los premios para contribuyentes cumplidores y las exenciones impositivas para los sectores vulnerables.
Respecto del Impuesto Automotor, el incremento se ubicará en torno al 49% y las valuaciones se actualizarán conforme a la información del Registro de Propiedad Automotor. En este caso, también se mantendrán los premios asociados al cumplimiento, pago único, pago por medios digitales y por adhesión al débito automático. Además, continuarán las exenciones para autos de más de 10 años y motos de más de cinco años.
Para los Ingresos Brutos, informaron que se continúa con el proceso de reducción y simplificación de alícuotas. En este caso, se equiparan alícuotas con otras jurisdicciones en ciertas actividades (servicios eventuales, ventas de autos nuevos, entre otras) para evitar incentivos a que los contribuyentes declaren mayor base imponible en las jurisdicciones con alícuotas más bajas
Claudio Vaca – Agroverdad