Los números detrás del incendio y la sequía: la Mesa de Enlace pidió más herramientas para paliar las pérdidas millonarias

A través de un comunicado, las cuatro entidades que nuclean la Mesa de Enlace solicitaron ayuda del gobierno nacional y gobiernos provinciales para los productores.

Corrientes está viviendo un momento dramático. Con más de 500 mil hectáreas afectadas por los duros incendios que azotan la provincia, se le suma la gravedad de la sequía y las pérdidas millonarias. Según los cálculos hasta el momento, el campo perdió casi 3000 millones de dólares cuyo impacto en la economía argentina será del 1% del PBI. En este marco, la Mesa de Enlace solicitó más herramientas para paliar las pérdidas millonarias.

Los dirigentes rurales participaron de una reunión en la sede de la Sociedad Rural de la localidad correntina de Mercedes, con la asistencia de más de 150 productores y representantes de las 5 provincias afectadas, que transmitieron sus problemáticas a Jorge Chemes (Presidente de CRA), Nicolás Carlino (Consejero de Coninagro), Nicolás Pino (Presidente de la Sociedad Rural) y Martín Spada (Director del Distrito NEA de la Federación Agraria).

Por el momento, según indicó CRA (Confederaciones Rurales Argentinas) en un comunicado oficial, en esa provincia ya se perdieron más de 25 mil millones de pesos, de acuerdo con un relevamiento presentado por los propios productores.

Un relevamiento realizado por las entidades alertó sobre cómo el clima está afectando no solo Corrientes sino otras provincias. En Misiones el período seco lleva casi 3 meses y se suma a un 2021 que fue el año con menos lluvias registradas de las últimas cinco décadas. El mismo fenómeno climático afectó al 90% de las hectáreas productivas de Entre Ríos con pérdidas económicas en su diversidad productiva. Además, en Corrientes los incendios ya quemaron más de 380 mil hectáreas convirtiendo los campos en una línea de fuego casi imposible de controlar. En Chaco y Formosa, agregó CRA, la sequía pegó fuerte en la actividad ganadera y en la zona agrícola donde los rendimientos serán inferiores a los estimados.

Al mismo tiempo, el comunicado aseguró que hay «500 mil hectáreas con impacto en diversas producciones como forestal, ganadera, tabaco, agricultura, yerbatera, citrícola, algodonera, bananera, etc. A este número hay que sumarle las cuantiosas pérdidas por la sequía y daños irreparables que hoy no se pueden calcular”.

Finalmente, a modo de conclusión, sentenció: “Por todo lo expuesto, los referentes de la CEEA remarcaron que las alteraciones producidas por el cambio climático no son un fenómeno eventual, por lo que se sabe que no alcanza con las declaraciones de emergencia. Por ello reclamaron a las autoridades provinciales y nacionales que pongan a disposición de los productores herramientas modernas para combatir estos flagelos y un eficiente apoyo financiero e impositivo para recuperar el capital de trabajo que permita reencauzar la actividad productiva”

– Ámbito