La diversificación ocupacional en San Juan, potenciada por la gran minería y la modernización productiva requieren nuevas especializaciones básicas.
La actividad económica sanjuanina está en plena transformación al diversificarse la matriz productiva con la industria minera y todos los servicios que la asisten, como también la tecnificación agropecuaria para disponer de excelencia vitivinícola, una olivicultura altamente competitiva y nuevos cultivos con alta demanda en mercados nacionales y externos.
Esta evolución requiere mano de obra especializada para lo cual juegan un papel fundamental las escuelas técnicas de la provincia a fin de capacitar a jóvenes en su primer trabajo, o dar basamento a la continuidad de la vocación en estudios superiores. Pero lo importante es la inserción laboral juvenil pensada y orientada desde las aulas.
Por ello la importancia de una modalidad de enseñanza con objetivos claros para evitar deserciones al tener por delante una salida laboral cierta, acode con la demanda de empresas conocidas y cercanas al lugar donde se aprenden especialidades a nivel secundario. Disponer de una escuela de capacitación laboral en cada departamento con orientación hacia los emprendimientos del lugar, contribuye a cubrir la demanda potencial de mano de obra calificada y evitar el desarraigo de los jóvenes lugareños.
Esta zonificación educativa se aconseja en todo el mundo a fin de fortalecer actividades con aporte tecnológico en diferentes actividades que antes se realizaban con prácticas tradicionales. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) sostiene que el mercado laboral requiere un 80% de técnicos y el 20% de profesionales de dirección, planificación e investigación, de allí la mayor demanda de personal técnico a nivel internacional.
También hay razones puntuales, como los problemas sociales que acusa nuestro país, con alta desocupación, índices de pobreza sin precedentes, y el achicamiento del aparato productivo por políticas económicas, fiscales y laborales desacertadas. Esto inclina a los jóvenes a buscar una orientación educativa corta, para asegurarse desde el bachillerato una calificación que le ayude a encontrar empleo.
En San Juan las EPET (Escuela Provincial de Educación Técnica) cumplen con todas las expectativas vocacionales y hay establecimientos como la Nº 1 «Ing. Rogelio Boero», que trasciende por su prestigio a nivel nacional. Es de esperar que la política educativa se afiance en esta área en toda la provincia
– Diario de Cuyo