La Municipalidad de Córdoba dejará en manos de profesionales de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Córdoba el pedido de la empresa Cliba para que se reajuste el actual contrato para el servicio de higiene urbana en la ciudad. Sólo si la casa de estudios reconociera el desfasaje en los costos, se reconocerá la mejora en el canon mensual.
La cuestión surgió al conocerse que la concesionaria había girado al Departamento Ejecutivo una nota con el pedido de mejora del contrato vigente –de aproximadamente cinco millones de pesos por mes– como consecuencia del aumento que experimentaron los costos de explotación del sistema.
Actualmente, el contrato para el servicio de recolección de residuos y barrido de calles es el más importante por su monto que tiene el municipio.
Pese a que trascendieron cifras de ajuste porcentual sobre las cifras que percibe actualmente, desde Cliba se indicó que no hay cantidades reclamadas.
Agustín Heredia, responsable de Relaciones Institucionales de la firma del grupo Roggio, indicó que lo único que se hizo fue pedir la aplicación de una cláusula específica que define la apertura de un estudio, cuando aumentan los costos de explotación del sistema.
Acuerdo de partes
El secretario de Obras y Servicios Públicos de la Municipalidad, Rubén Borello, recordó que en la discusión por la deuda reclamada por Cliba –desde el año 2000 hasta febrero último– por aumentos no otorgados y atrasos en los pagos e intereses, se llegó a un acuerdo mediante el que se reconoció una cifra de 35 millones de pesos más 3,17 millones en concepto de financiación.
Los estudios para llegar a ese monto fueron realizados por profesionales de la UNC, y según precisó Borello, en el acuerdo se estableció que cualquier reclamo por mayores costos debía ser analizado con el mismo criterio, por la universidad. “Si los análisis daban que los costos de la empresa superaban el 7,5 por ciento, se debía ajustar el pago”, indicó.
Dijo el funcionario que lo que hubo no fue un reclamo de la concesionaria, sino que se planteó la aplicación de esa cláusula. “Ellos habrán hecho los números y entenderán que se superó ese 7,5 por ciento. Yo no sé si es así. Por eso enviamos a la universidad para pedir que estudien los costos”, dijo Borello. Añadió que si existe el desfasaje (superior al porcentaje citado), se deberá aumentar el canon.
El planteo de Cliba llega a menos de seis meses de que expire el contrato con el municipio, mientras se elaboran los pliegos para la nueva licitación. Si bien la expectativa es cumplir con los términos, se reconoce que el trámite de recepción de ofertas, evaluación e impugnaciones podría exceder los plazos, por lo que podría haber una prórroga del actual contrato.
– La Voz del Interior