La Cámara Empresaria Minera de Córdoba dice que se producen 50 millones de toneladas de minerales en la provincia. El sector emplea en forma directa a 3.600 mineros y hasta a seis mil trabajadores en total.
En Córdoba hay 220 empresas mineras. Algunas son pequeñas y están dedicadas a producir algún mineral específico; y otras son grandes, en general canteras, que en total producen 50 millones de toneladas de minerales por año, según la Cámara Empresaria Minera de Córdoba (Cemincor).
El 80 por ciento de lo que se extrae corresponde a áridos, piedra y arena, por lo que desde el sector privado aseguran que sin minería en la provincia no hay construcción privada y, mucho menos, pública.
“Todos tenemos mucho respeto por el pensamiento de algunos grupos que están en contra de la actividad. Pero hay que tener en cuenta que sin minería no tendríamos obras de infraestructura, no se podrían hacer hospitales ni casas, ni llevar luz, electricidad o agua a la población”, advierte Hernán Soneyro, presidente de la cámara empresarial.
Según datos de la entidad, la producción de las canteras cordobesas también tiene su impacto en el país: producen el 35 por ciento de la piedra que consume la construcción de infraestructura en toda la Argentina.
A esto suma el impacto laboral: Córdoba es uno de los principales aportantes de afiliados a la Asociación Obrera Minera Argentina (Aoma), con 3.600 trabajadores. Sumados el personal jerárquico, administrativos y profesionales, el sector genera entre cinco mil y seis mil puestos de trabajo.
Para Soneyro, no hay que plantear una dicotomía entre minería y ambiente. “En el mundo, la tendencia en minería es tener sistemas productivos cada vez más controlados por las leyes, los gobiernos y los grupos de interés”, resalta.
La actividad –advierte el empresario– está reglamentada por un código que data de 1887, pero también por la ley nacional 24.585, de 1995, y la ley 10.208 de Ambiente de Córdoba, de 2014.
“Cada vez es menos posible pensar en hacer minería sin cuidar el medio ambiente. Tanto las grandes empresas como los pequeños emprendimientos familiares tienen sus programas de remediación del paisaje y matrices productivos con cuidado del impacto ambiental”, explica Soneyro.
En este sentido, señala que canteras como El Ombú, Diquecito y Cantesur han desarrollado sus propios viveros para la recreación del terreno con especies vegetales nativas.
Cita, además, el caso de la empresa Flourita, una minera cordobesa que aplicó un plan de remediación utilizando el escombro que sacó de la montaña para armar un suelo propicio para plantar viñedos. Y con esto ya produjo más de 800 botellas de vino, mejoró la visión del terreno con las vides y generó nuevos puestos de trabajo.
“Hay que seguir avanzando en un sistema productivo lo más controlado posible, con algún impacto negativo, pero concentrado en cómo se puede remediar”, concluyó el empresario.
Un negocio que impacta en la construcción
La minería en Córdoba se enfoca en insumos de obras.
35% del total de piedra que se produce en el país para la construcción sale de las canteras cordobesas, según la Cámara Empresaria Minera de Córdoba. La actividad emplea a unos seis mil trabajadores, de los cuales 3.600 están agrupados en actividades mineras y sindicalizados bajo la tutela de la Asociación Obrera Minera Argentina (Aoma).
DIEGO DÁVILA – La Voz del Interior