Luego de las dos sesiones fallidas de las últimas semanas, el vicepresidente primero a cargo de la Legislatura, José Grazzini, confirmó el llamado a sesión extraordinaria para los primeros días de febrero. La rosca pasa para 2019 y promete nuevos capítulos
Los últimos días de diciembre fueron caóticos para la Legislatura de Chubut, con dos sesiones suspendidas consecutivamente, en medio de debates intensos por la fijación del calendario electoral, el Presupuesto, los permisos de pesca, y más proyectos clave para el futuro político de la provincia.
Primero fue una amenaza de bomba que obligó a desalojar el recinto, luego manifestantes que provocaron desmanes, y por último el calendario apretado de diciembre, lo que impidió a los Diputados avanzar en su labor parlamentaria, con condimentos de por medio, como las acusaciones de uno y otro lado por las causas del congelamiento de la Legislatura.
Lo cierto es que, pasado el temblor de fin de año, el vicepresidente primero a cargo de la Legislatura, José Grazzini, confirmó el llamado a sesión extraordinaria para el 5 de febrero con la finalidad de tratar todos los proyectos pendientes.
«Hay muchas cuestiones que quedaron pendientes, fundamentalmente la ley Tributaria, el presupuesto provincial 2019, la ampliación de deuda y otros temas centrales que hay que seguir discutiendo», aseguró Grazzini.
La intención de la oposición es retomar cuanto antes el trabajo legislativo, con la posibilidad de ir a la carga nuevamente contra los planes del oficialismo de adelantar las elecciones, así como también en el debate por el Presupuesto. Por ahora, hay fecha, restará saber si se dan las condiciones.
– La Tecla Patagonia