Vidal baja Ingresos Brutos y Sellos, pero sube Inmobiliario (56% promedio)

En línea con Nación, avanza en bajar la presión tributaria, con hincapié en el sector productivo. Pero actualizará valor fiscal de los inmuebles. Pedido de endeudamiento por $58.890 M.

Clausurado ya el frenesí electoral, el Gobierno de María Eugenia Vidal puso el pie en el acelerador de la gestión y envió anoche a la Legislatura los proyectos de Presupuesto 2018 y de Ley Impositiva, además de una tercera iniciativa que impulsa la adhesión de los municipios a una estricta Ley de Responsabilidad Fiscal provincial.

La norma tributaria incluye un extendido diagrama de reducción en los impuestos a los Ingresos Brutos y Sellos -claramente más profundo que el de este año, y con hincapié en los sectores productivos-, en línea con la intención, compartida con la Casa Rosada, de avanzar en una disminución gradual de la presión tributaria, que caerá así en el caso bonaerense de 5,8% del producto provincial (este año) a 5,5% (en 2018).

Pero, en cambio, el Gobierno de Vidal avanzará en una actualización de las valuaciones fiscales de tierras, con topes, lo que derivará en 2018 en un incremento en el impuesto Inmobiliario Urbano del 56% promedio, y del Inmobiliario Rural del 50%. Este año fue del 36%.

En el balance de subas y bajas, el costo fiscal del paquete impositivo -lo que Buenos Aires dejará de recaudar- será del orden de los $10 mil millones.

En paralelo, otra andanada de proyectos -que augura rispideces con la oposición y con gremios- recaerá en el Parlamento desde la semana que viene (ver aparte).

La pretensión es intentar que todos sean aprobados antes del recambio del 10 de diciembre, pese a que luego el recinto le será más favorable a Cambiemos.

En 2016 no logró prosperar el intento de Vidal de aplicar un revalúo de tierras rurales y urbanas, y se mantiene la valuación fiscal de hace 12 años, en el segundo caso.

«Los patrimoniales están muy retrasados; hoy recaudamos más de Automotor que de Inmobiliario, y la masa de autos de la provincia vale más que las propiedades para el fisco», graficó ayer el ministro de Economía bonaerense, Hernán Lacunza, en un diálogo con periodistas en la sede porteña del BAPRO, al que asistió Ámbito Financiero.

Por eso -afirmó- pondrán al día las valuaciones fiscales. «Más que revalúo lo llamo actualización, que se hará todo junto pero con topes, de acuerdo al valor de la propiedad, de entre 40% y 75%», dijo, respecto de la evolución que mostrará el Inmobiliario.

Hoy -explicó- se paga en la provincia 11 pesos anuales de Inmobiliario Urbano por metro cuadrado, mientras que ese valor escala a 147 pesos anuales por hectárea en zonas ganaderas y a $527 pesos anuales por hectárea en el núcleo agrícola más fuerte.

«Por primera vez en muchas décadas, al mismo tiempo el año que viene va a bajar el déficit, va a subir la inversión en obra pública y van a bajar los impuestos», destacó Lacunza. El presupuesto -que signará el tercer año de mandato de Vidal- determina ingresos por $599 mil millones, gastos por $630 mil millones (la mitad son salarios) y un déficit de $30.900 millones.

También precisa que la deuda solicitada a la Legislatura será de $58.890 millones, que es el 1,3% del producto provincial (los años precedentes fueron del 1,4%, y del 2%). El destino de la deuda es -casi en partes iguales- el financiamiento de infraestructura y el pago de vencimientos de deuda. El plan de gastos 2017 incluyó un pedido de deuda de cerca de $52 mil millones, aunque la solicitud inicial fue de $90 mil millones.

Lacunza precisó además que la provincia tiene superávit corriente y déficit financiero, que se explica por la inversión. Y que el mayor incremento de recursos estará destinado a Desarrollo Social (33%), Infraestructura (22%) y Salud (19%).

Para este año hay un déficit proyectado de 0,73% del producto geográfico provincial, mientras que el año que viene va a ser presupuestado en 0,68%. En 2015 y 2016 fue del 1% del producto.

SILVINA KRISTAL – Ámbito