Vaca Muerta jaqueada por las batallas por el empleo y el territorio

Los conflictos de la Uocra y de las comunidades mapuches inciden sobre la industria y la vida de los vecinos.

“Están destruyendo este proyecto nacional”, apuntó Díaz. –

El portón de entrada chilla y todos giran la cabeza para mirar. Son unos 50 obreros que llegaron hasta la base de Techint Construcciones e Ingeniería, en el Parque Industrial de Añelo, por un aviso clasificado. Pero pasan las horas y la entrada sólo se usa para pasar los termos y seguir con la mateada. Como en una pintura de lo que es la localidad cabecera de Vaca Muerta, la convocatoria coincidió con la protesta de una fracción de la Uocra neuquina que era custodiada por la policía neuquina.

“Acá es fácil, ¿ves? (dispara en el aire una ráfaga circular imaginaria con el índice) los que están con borcegos son los que tienen laburo. Los que estamos de zapatillas, vinimos por el aviso del diario”. El que habla es Miguel, nació en Santa Fe y hace unos años está en El Chañar. Se presenta como oficial especializado y, como muchos en la fila, está convencido de que “hoy (por ayer) no va a pasar nada. Pero hay que quedarse. Por ahí sale un tipo a las tres de la tarde, entrega unos números y te dice: vení mañana”.

Añelo, a 100 kilómetros de la capital neuquina, destila fragancia de pueblo petrolero. Desde el boom de los hidrocarburos no convencionales, en 2012, se asocia a la localidad con una oportunidad única. Única en todo sentido: desde el autoabastecimiento energético hasta la posibilidad de negocios millonarios, pasando por el comercio minorista y las oportunidades laborales. Todos quieren un “pedacito de la vaca muerta”, dice un vecino.

En la práctica, ese tironeo se materializa en conflictos que, la mayoría de las veces jaquean el desarrollo del proyecto estrella para el gas y el petróleo en el país. Cortes de ruta, bloqueos a yacimientos, reclamos territoriales y pujas sindicales, son parte de la “guerra” en superficie por Vaca Muerta.

Al intendente Darío Díaz no se le escapa el panorama: “si yo fuera inversor no traería mi plata a Vaca Muerta, por el nivel de conflictividad que tiene a veces”. En diálogo con “Río Negro” aseguró que él está en condiciones de garantizar la paz social “adentro de Añelo, pero no afuera”. (Ver aparte)

Los comerciantes también están preocupados. “Cada vez que cortan la ruta tengo que tirar mercadería. La panificación es así, se vende en el día”, dice Alberto, un bahiense que llegó a Añelo atrás del sueño de la abundancia petrolera. Fabio, un gomero histórico de la localidad, tiene fe en que se solucionen los conflictos pero se pregunta qué pasaría si las empresas dejan de pasar por la localidad “para evitar los cortes”.

Mantener la paz social significa, para el intendente Díaz, solucionar los problemas de los vecinos en paralelo al crecimiento petrolero. Alrededor del municipio que dirige, donde trabajan 170 personas, se moverán este año 2.900 millones de dólares.

“Se mueven todos los gremios, está petroleros, Uocra, camioneros y gastronómicos. Me siento con todos, y lo mismo con las empresas, y les digo: primero la gente de acá. En eso no tenemos problemas, el problema son las internas o cuando viene gente de afuera”, explicó.

El año pasado, Díaz firmó una resolución en la que exige, a las familias que solicitan ayuda social, un mínimo de seis meses de antigüedad en la localidad. En lo que va de 2017 le pagaron los pasajes a diez familias para que dejen Añelo y vuelva a sus lugares de origen. “Prefiero pagar pasajes y destinar fondos de ayuda social a los verdaderos vecinos de la localidad”, explicó.

Consultado por quién tiene la responsabilidad de intervenir, el jefe comunal apuntó contra la Provincia. “Creo que después del conflicto con la comunidad Tratayen (ver aparte), el gobierno está interviniendo más”, finalizó.

Personas y dinero
8.000
habitantes tiene la localidad de Añelo. En 2012 la población era la mitad. Mayoritariamente llegaron desde otras ciudades.
u$s 2.900
millones desembolsarán las petroleras este año en los
no convencionales.
170
empleados tiene el Municipio de la localidad. Incorporó personal para las áreas sociales y de control en comercios y yacimientos.
Añelo, una localidad de oportunidades. Desde el desarrollo del autoabastecimiento energético hasta oportunidades laborales.
El comercio le teme al fantasma de los cortes de ruta
Los comerciantes de Añelo conocen de contrastes. De las mieles del boom y el “deme dos” a la caída de la actividad y el “traemos de casa”. Pero ahora su preocupación no es la economía sino los conflictos sociales que amenazan con paralizar parte de la actividad en Vaca Muerta, que es su verdadero motor de crecimiento diario.

Fabio, propietario de “El Pampita”, la gomería más antigua de la localidad, dice que la actividad está levantando y que en el pueblo todos esperan el año que viene cuando “dicen que todo va a repuntar, que llegan las inversiones”. “Acá el que tenía una Trafic, se compró otra. El que tenía un comercio, lo agrandó. Pero si te cortan la ruta y las empresas empiezan a dejar de pasar por acá (la Ruta 7 atraviesa de punta a punta Añelo), se muere el pueblo”, dijo.

Alberto es de Bahía Blanca y desde hace tres años está en la localidad. Puso un mercadito con panificaciones. “Esto es lo que se vende acá”, dice con gesto de comerciante señalando varias bandejas de facturas y torta fritas. “Cuando hay quilombo no se vende nada. No pasan las camionetas y nos queda toda la mercadería. Esto es panificación si no se vende en el día, lo perdemos”, se lamenta.

La bolsa de trabajo
Interna de la Uocra
Fracciones. Dos sectores se disputan la conducción de la Uocra neuquina. Uno encabezado por Juan Carlos Levi y el otro por Juan Godoy.
Bolsa. El proyecto de Techint en Vaca Muerta prometió 1.400 puestos para la construcción.
Listados. Uocra nacional y la Provincia acordaron que los listados de ingreso se validen vía la subsecretaría de Trabajo provincial, pero no se cumplió.
Intervención. Uocra nacional envió un interventor, Damián Miler, actualmente ligado a Godoy. La Provincia pide que se cumpla el acuerdo.
Retrasos. Las protestas generaron un atraso en las obras de, al menos, dos meses y no descartan nuevas demoras.
Trabajo. Hay 600 obreros en funciones. Ahora restan 800, muchos de los cuales son tareas calificadas.
“Si esto sigue así, yo no invertiría”, dijo el intendente
Un banner de lona que combina verdes, azules y fotos generales de Añelo, es el telón que tapa la humedad en las paredes del despacho del intendente Darío Díaz. El jefe comunal fuma en la habitación mientras afuera, como desde años, hay gente esperando para hablar con él. “Los conflictos hacen que las inversiones no vengan o que se atrasen”, resume.

Díaz se fogueó con el crecimiento de los desarrollos no convencionales y no le escapa a los problemas de la localidad, pero sabe muy bien hasta dónde llega su zona de influencia (y responsabilidades). “Yo puedo garantizar la paz social adentro de Añelo, pero no afuera”.

Así explica la conflictividad que atraviesa la localidad por el reclamo de sectores internos y ajenos. El jefe comunal maneja un listado de trabajadores desocupados locales y asegura que es su prioridad cuando una empresa lo contacta para desembarcar con algún proyecto.

Reconoció estar preocupado por los conflictos que, dice, son externos: “los problemas de acá los resolvemos nosotros, pero ahora no es gente de Añelo la que protesta”.

Al referirse a la interna de la Uocra dijo que “es una interna que están queriendo definirla acá y en una obra de Techint (en referencia al proyecto de gas Fortín de Piedra)”. Díaz quedó involucrado en medio del conflicto cuando se conocieron audios que lo vinculaban a uno de los sectores; sin embargo más tarde buscó despegarse de la pelea.

“Nosotros queremos que primero se tome a la gente de acá. En el caso de la construcción lo conseguimos, teníamos 80 desocupados. Después sí, que se busque afuera, pero no podemos tener vecinos esperando trabajar cuando hay gente de otras provincias”, explicó Díaz.

El intendente apuntó a la Provincia como autoridad de aplicación para la resolución de los conflictos. Pero reconoció que “está interviniendo más”.

Junto con la interna de la Uocra, el reclamo territorial de las comunidades es una de las alarmas que se encienden en tierras petroleras. Sobre este tema también fue determinante: “todas las comunidades mapuches que aparecieron en Añelo llegaron después de Vaca Muerta. Entiendo que crear comunidades es un negocio de dos o tres personas. Acá nos conocemos todos”.

Por último, se lamentó que las protestas que jaquean a la actividad no tengan una solución duradera. “Si esto sigue así, te digo, si yo fuera inversor, no traería mi plata a Vaca Muerta, por el nivel de conflictividad. Están destruyendo esto que es un proyecto nacional”, finalizó.

Reclamo territorial
Comunidades mapuches
Reconocimiento. Una nueva comunidad se formó en la zona de Tratayen, kilómetros antes de Añelo en el acceso a una de las áreas con más actividad en Vaca Muerta.
Protesta. Los integrantes reclamaron preexistencia sobre las tierras y bloquearon el ingreso a un campo petrolero. Allí también funciona un establecimiento agrícola.
Negociación. Tras un intento de desalojo, la Provincia inició una mesa de diálogo con los representantes de la comunidad.
Insistencia. Los Campo Maripe, la primera comunidad reconocida en Vaca Muerta, esperan que la Provincia realice otro relevamiento.
En conflicto. La nueva comunidad, los Campo Maripe y los Kaxipayiñ , son los tres sectores que realizaron protestas este año.

FEDERICO ARINGOLI – Diario Río Negro