Alta Gracia. Cabecera del departamento Santa María, el que más ha crecido en relación con dos años atrás. El eje está entre esa ciudad, las comunas que la rodean y Malagueño.
El área que rodea a la Capital y los valles turísticos son los que más sumaron habitantes entre 2015 y 2017. Santa María es ahora el departamento con la tasa más alta. Hay varias sorpresas para anotar.
La población de Córdoba se está moviendo. Incluso en lapsos cortos, como dos años, se perciben variaciones notorias. Las mudanzas internas hacen que algunas ciudades y regiones crezcan más que otras. Y entre esos cambios asoman no pocas sorpresas.
No asombra el dato de que es el área que rodea a la Capital la que más crece actualmente: lo hace desde hace al menos dos décadas.
El departamento Colón, con eje en su región de Sierras Chicas, es el de mayor crecimiento demográfico en las últimas dos décadas, según los censos de 2001 y 2010.
Pero algo está cambiando: al menos en los dos últimos años es Santa María (con eje en las ciudades de Malagueño y Alta Gracia) el departamento que en mayor proporción aumenta su población.
El Gran Córdoba, primero, y los valles turísticos, luego, son las regiones que más crecen en habitantes. Ya lo hicieron entre 2001 y 2010, y ese fenómeno se sigue acentuando hoy.
Decrecen los barrios tradicionales, mientras crecen los de la periferia
Otra sorpresa: hay departamentos en el sudeste, centro y sur provincial que, aun perteneciendo a las regiones de mayor desarrollo económico, están hoy entre los que menos suman habitantes, con niveles similares y hasta inferiores a varios de los más empobrecidos y siempre postergados del noroeste. Incluso, hay pueblos del sudeste y del extremo sur que están descendiendo en población, más que en el norte.
En los dos últimos años, entre las ciudades (hay 50 en Córdoba de más de 10 mil habitantes) la que más creció fue Malagueño (en Santa María, entre Alta Gracia y Carlos Paz). Luego, se escalonan Mendiolaza, Juárez Celman, Saldán, Malvinas Argentinas y La Calera (todas del departamento Colón).
En todos los casos hay una misma explicación central: la mudanza de los capitalinos hacia localidades vecinas.
La Capital es otra historia: muestra áreas con notorio crecimiento junto con barrios que han bajado su población. Su promedio de evolución poblacional en estos dos años está apenas por debajo del provincial, pero no luce tan bajo como en la comparación entre los censos 2001 y 2010, cuando fue junto con Minas el departamento que menos creció.
Otro punto saliente es que, como en Capital, se empieza a percibir ahora un fenómeno similar en Río Cuarto, la mayor ciudad del interior, que registra un bajo crecimiento (apenas 1,9 por ciento en dos años), pero acompañado por otro bien alto en sus pueblos más vecinos: Holmberg (13 por ciento) y Las Higueras (12).
De igual modo, se explica lo que está sucediendo en los otros dos grandes centros urbanos del interior: Villa María creció poco entre 2015 y 2017 (dos por ciento), pero ha sido alto el aumento poblacional de su pegada Villa Nueva (6,9 por ciento).
No es muy distinto lo de Villa Carlos Paz, que ya no crece como antes en su radio urbano, aunque sí lo hacen de modo marcado muchas de sus comunas vecinas en el sur de Punilla.
INTERACTIVO. Cuánto crecieron las 15 ciudades más grandes
De dónde salen
Los datos no se corresponden a censos: el último fue en 2010 y para el próximo habrá que esperar hasta 2020. Sin esa herramienta más precisa, la más cercana pasa a ser los padrones electorales. Los datos que aquí se publican surgen de la comparación que el grupo Open Data Córdoba realizó de los padrones para las elecciones de 2015 y 2017.
Los padrones no marcan la población total, sino la evolución de los mayores de 18 años con domicilio en un circuito. Salvo excepciones, cada circuito se corresponde a una localidad. De todos modos, respecto de un censo es probable que surjan leves diferencias.
Por departamentos
Entre 2015 y 2017, el padrón electoral nacional creció un 3,48 por ciento. En Córdoba engordó algo más: 3,68.
En ese marco, la Capital tuvo una evolución apenas por debajo de ese promedio provincial, con 3,13 por ciento de incremento.
El departamento Colón no para de crecer en habitantes. Hasta el padrón de 2015, era Río Cuarto el más poblado del interior. Desde 2017, Colón lo superó en electores.
Pero –vale anotarlo– ya no es Colón el que más crece: ahora lo hace en mayor medida Santa María, cuyo padrón evolucionó en los dos últimos años un 8,3 por ciento, frente al 8,1 de Colón. Ambos rodean (por el noroeste uno, y por el sudoeste el otro) a la Capital.
El tercero en crecimiento poblacional en estos dos últimos años es Calamuchita. No es sorpresa: ya era segundo, detrás de Colón, entre los censos 2001 y 2010.
Otra zona serrana viene empujando, de la mano del desarrollo turístico: San Alberto y San Javier (Traslasierra) aumentaron sus padrones en estos dos años en un 6,6 y un 7,7 por ciento, y quedaron en cuarto y quinto lugar.
El sexto, de los 24 departamentos cordobeses, es también serrano: Punilla (5,1), que, aunque bajó algunas ubicaciones respecto de la década anterior, se mantiene entre los de mayor evolución poblacional.
Otro dato que marca el crecimiento poblacional del Gran Córdoba es que los tres departamentos que subieron puestos entre 2015 y 2017 son de esa área: Santa María subió tres escalones, Colón uno y Río Segundo uno. Mientras, hay tres del sudeste y sur provincial que bajaron de posiciones en la tabla: Río Cuarto, Unión y Marcos Juárez. Los otros 18 mantuvieron en 2017 los mismos escalones que ocupaban en 2015.
Sur y sudeste, menos
De allí parte otro dato llamativo: luego del sabido mayor crecimiento de las regiones que rodean a la Capital, no son los departamentos de las zonas de mayor desarrollo económico (ligadas al campo) las que más aumentaron en población. Entre los puestos siete y 10 se ubican los del más empobrecido norte: Cruz del Eje, Ischilín, Totoral y Sobremonte, con evoluciones de sus padrones del 4,9 al 3,9 por ciento en dos años. Todos ellos, por encima de la Capital (3,1).
Asombra que entre los que menos crecen estén Marcos Juárez, en el sudeste, cuya cantidad de electores sólo aumentó en dos años un 0,9 por ciento, y General Roca, en el extremo sur, con un 0,6. Sólo el norteño departamento Pocho, históricamente acostumbrado a la última fila, está por debajo, con un 0,1 por ciento.
En estos años, otros departamentos de las “zonas ricas” registran también baja evolución de población: Roque Saénz Peña cuenta un 1,4, mientras que Río Cuarto, Tercero Arriba y Unión comparten un bajo 1,9.
Ya en la comparación de censos 2001-2010, esos departamentos del centro, sudeste y sur provincial mostraban un crecimiento poblacional bien por debajo del promedio provincial.
POR CIUDADES. Malagueño y Mendiolaza, las que más se expanden hoy.
La década anterior
El censo de 2010, comparado con el de 2011 había mostrado que los departamentos que más habían crecido habían sido Colón (31,6 por ciento), Calamuchita (20,5) y Punilla (15). La Capital en esa década había aumentado un 3,5 por ciento su población.
Por Fernando Colautti – La Voz del Interior