Imperdible: navegar en kayaks en glaciar Upsala

Una aventura para todo el año en el glaciar, al que se accede a través del canal del mismo nombre.

Navegar entre los témpanos del glaciar Upsala, en la provincia de Santa Cruz, es un desafío casi único en el mundo, tanto por la experiencia de maniobrar un kayac sorteando los grandes bloques de hielo que flotan en las azules aguas del Lago Argentino, como por el impacto que causa el paisaje de los bosques patagónicos como principal escenografía de la aventura.

Esta posibilidad existe, y se puede hacer todo el año sin distinción de temporadas, según ofrece como propuesta la firma Calafate Mountain Park (CMP), que además, y para completar, tienen un parque de nieve en la estancia La Anita.

El glaciar Upsala, al que se puede acceder a través por el canal del mismo nombre, es el segundo más grande de Argentina que se eleva hasta los 60 metros de altura sobre el Lago Argentino en el Parque Nacional Los Glaciares.

Los turistas que se animan a esta aventura son llevados en micro desde El Calafate hasta el Puerto de Punta Bandera, lugar donde los estarán esperando expertos guías que invitarán a los visitantes a subir a bordo del ferry que navegará durante tres horas.

Es un placer tan intenso como el frío del hielo

Los que se atrevan a este desafío podrán navegar entre los bloques de hielo, sobre un agua helada —apenas sobre el punto de fusión— a la que se llega con un traje seco, aislante, muy complicado de colocar pero vital.

Una vez arribados, hay que meterse dentro del traje seco y finalmente, ya en el kayak, dominar el método para enderezar el bote por si se llega a dar vuelta, ayudado con el remo y los abdominales.

Navegar frente al glaciar “es un placer casi tan intenso como el frío que emanan los hielos”, dijo Héctor Bonafonte, un visitante cordobés que se animó a disfrutar de la experiencia.

Una vez de regreso los ya experimentados kayaquistas deberán maniobrar para quitarse el dificultoso traje, comentar con admiración lo vivido, y despedirse de sus eventuales compañeros de aventura.

Balcones de Calafate, otra opción de visita

Además de esta experiencia, hay otro recorrido que realiza la empresa a los denominados “Balcones de Calafate” que se hace en un vehículo todoterreno, y que tras ascender a un monte ubicado a 1.600 metros sobre el nivel del mar, permite unas vistas panorámicas privilegiadas de toda la ciudad.

También hay circuitos para hacer en motos de nieve o cuatriciclos, depende de la temporada, o realizar caminatas hasta una confitería que se encuentra en el lugar, especial para un reconfortante almuerzo o una romántica cena.

– Nuevo Diario