Una mirada al futuro

Ser parte de una generación que vivió toda su vida en democracia nos traspasa. Nuestra visión del mundo, nuestras expectativas y la forma en que concebimos la política es diametralmente distinta a la que pueden tener nuestros padres, que atravesaron periodos de fuerte inestabilidad.

La democracia, la vigencia de los derechos humanos y el diálogo no son negociables para nosotros.

Partir de un período histórico con maduración política y con muchas batallas culturales ganadas no necesariamente nos hace mejores. No se trata de que la juventud sea un valor en sí mismo, sino una condición que puede y debe impulsarnos a hacer lo que nunca se hizo, a cambiar el rumbo, a modificar status quo y a mirar al futuro.

Con esta convicción, desde el Ministerio del Interior, con Rogelio Frigerio a la cabeza, convocamos al Primer Encuentro Nacional de Intendentes Sub35.

La reconfiguración del mapa político argentino nos arrojó 118 intendentes, entre los más de 2.200 de todo el país, que tienen menos de 35 años. Así la foto, de la semana pasada, con intendentes jóvenes de todos los rincones de nuestro país, hubiera sido imposible de pensar poco tiempo atrás, en una Argentina sectaria y con estructuras de antaño.

La nueva política no puede quedar reducida a caras nuevas, tiene que haber ideas nuevas. Promoviendo dirigentes políticos que estén preocupados y ocupados en solucionar los problemas de sus vecinos y no en discusiones estériles del pasado. Desde ese principio, el encuentro giró en torno de apostar a la agenda del futuro de los gobiernos locales, de la mano de actores nuevos, que aporten creatividad e innovación. Y a generar un espacio que achique distancias geográficas potenciando soluciones y desafíos comunes.

Tenemos la responsabilidad de ser los protagonistas del cambio en la política nacional, dejando viejas dicotomías producto de generaciones pasadas. Una Argentina federal y realmente desarrollada requiere de grandes jóvenes dirigentes que avancen mirando al futuro.

LUCAS DELFINO – Ámbito