Los datos del INDEC revelan que el ingreso individual real de los argentinos es mucho más bajo, lo que desató una discusión nacional sobre informalidad, desigualdad y el impacto de Vaca Muerta.
Neuquén volvió a quedar en el centro del debate nacional tras conocerse un salario promedio formal que superó por primera vez la inflación mensual. La cifra, registrada por Interbanking para octubre de 2025, ubicó el ingreso medio en 1.483.740 pesos, un récord histórico para la provincia y para el país. El dato se difundió rápidamente en redes y generó celebraciones, pero también cuestionamientos cuando comenzaron a conocerse las cifras oficiales del INDEC, que exhiben una realidad muy distinta para la mayor parte de los hogares argentinos.
La diferencia entre ambas mediciones no es un error, sino una muestra de la profunda fragmentación del mercado laboral. Interbanking analiza exclusivamente los sueldos formales depositados en cuenta, tanto del sector privado como del sector público. Esta foto refleja el desempeño del empleo registrado de calidad, un segmento donde Neuquén tiene un peso decisivo gracias al empuje de Vaca Muerta y de las actividades asociadas a la industria hidrocarburífera.
Qué dice el INDEC
El INDEC, en cambio, mide ingresos individuales para toda la población que percibe algún tipo de ingreso, lo que incluye trabajo informal, monotributistas, jubilados, pensionados, beneficiarios de planes sociales y personas con rentas no laborales. Este universo abarca a más de 18 millones de personas y ofrece un panorama más completo —y más crudo— del poder adquisitivo promedio en la Argentina actual. Según los últimos datos oficiales, el ingreso medio quedó en 879.285 pesos, muy lejos del registro neuquino y mostrando que la mejora del sector formal no se replica en la mayoría de los trabajadores.
El economista Martín Tetaz explicó que la distancia entre ambas cifras tiene que ver con lo que cada indicador intenta medir. Mientras Interbanking se concentra en salarios bancarizados con estabilidad y convenios fuertes, el INDEC refleja el funcionamiento real de una economía atravesada por la informalidad y la desigualdad. En ese marco, los ingresos más bajos —correspondientes al 10 por ciento de la población con menos recursos— no superan los 122.886 pesos, mientras que el 10 por ciento más rico llega a casi tres millones.
El contraste expone una fractura que también se vive dentro de la propia provincia: la actividad petrolera eleva salarios y dinamiza el empleo formal, pero no alcanza a todos los sectores. La construcción, el comercio, los servicios y el empleo no registrado muestran cifras mucho más parecidas a las del promedio nacional que a los sueldos vinculados al corazón de Vaca Muerta.
El Centro de Estudios Scalabrini Ortiz advirtió que el dato de Interbanking es positivo para el empleo formal neuquino, pero no describe el poder adquisitivo real de la mayoría de las familias. En otras palabras, el buen desempeño salarial en la industria petrolera convive con un escenario donde millones de trabajadores siguen perdiendo ingresos frente a la inflación y la precarización.