
El gobernador Maximiliano Pullaro calificó de “gravísimo error” la posibilidad de que Nación no prorrogue la baja transitoria de retenciones que rige hasta el 30 de junio; desde la provincia aseguran que el regreso del esquema anterior afectará duramente a los productores santafesinos y reclaman una política estratégica que elimine ese “maldito impuesto”
La provincia de Santa Fe alzó la voz frente al inminente vencimiento del decreto nacional que desde enero redujo los Derechos de Exportación (DEX) a productos agropecuarios. El gobernador Maximiliano Pullaro advirtió que volver al esquema anterior sería “un gravísimo error” del Gobierno nacional y pidió directamente la eliminación de las retenciones.
“Es no mirar al interior productivo de la República Argentina. Todo lo que se genera en el campo debe quedar en los pueblos y en las ciudades del campo fundamentalmente. Los gringos, los trabajadores, no se llevan la plata al exterior, no la ponen en cuentas offshore, no la ponen en criptomonedas. Invierten absolutamente todo lo que ganan en tecnología para poder producir más, o en poner en ladrillos en las ciudades, con lo cual estoy convencido que si esta política no cambia, si no se eliminan las retenciones o si no se prorroga la medida vigente, realmente el gobierno nacional se va a equivocar y va a cometer un gravísimo error”, sostuvo.
Además, Pullaro insistió en la necesidad de proteger a la industria: “No solo hay que eliminar las retenciones, sino que la apertura del país debe ser estratégica e inteligente. Tenemos que cuidar los puestos de trabajo”.
Por su parte, el ministro de Desarrollo Productivo provincial, Gustavo Puccini, fue aún más específico: alertó que si no se renueva la medida vigente, “los productores santafesinos perderán cerca de 227 millones de dólares” solo por el volumen pendiente de comercialización de la campaña 2024/25.
“Ese dinero no vuelve ni en arreglo de rutas, ni en obras de infraestructura energética o logística. Es plata que se va. Mientras tanto, el campo transfirió más de 2.000 millones de dólares en lo que va del año al Estado nacional en concepto de retenciones, un impuesto que ni siquiera es coparticipable”, denunció el funcionario.
Puccini también remarcó que “no hay certezas para invertir”, lo que complica la toma de decisiones por parte del sector agropecuario: “Necesitamos reglas claras. La discusión de fondo es qué tipo de Estado queremos. No puede tratarse solo de una cuestión fiscal o cambiaria”.
El ministro recordó que en otras ocasiones lograron que Nación recapacitara: “Cuando se intentó poner retenciones a la industria y gravar otras producciones, demostramos con datos el daño que eso generaría, y fuimos escuchados. Esperamos que ahora suceda lo mismo”.
Finalmente, Puccini cerró con una crítica a la falta de reinversión de lo recaudado en los territorios productivos: “Los recursos que el Estado capta del campo no se traducen en obras clave como trenes, rutas o mejoras sociales básicas. Eso también debe discutirse”.
Con la fecha límite del 30 de junio cada vez más cerca, desde Santa Fe redoblan la presión para que Nación revise su postura y evite una vuelta atrás que podría afectar severamente a uno de los sectores más dinámicos de la economía argentina