El primer pozo horizontal realizado en alianza entre YPF y CGC ya está en producción. Las firmas buscan determinar la economicidad del shale de Santa Cruz.
Las expectativas en torno a los resultados del primer pozo horizontal con destino a la formación Palermo Aike, la Vaca Muerta de Santa Cruz, son enormes. Pero las primeras producciones obtenidas no fluyen por ahora al ritmo esperado, aunque sí sorprenden por color casi dorado del petróleo.
Este primer pozo horizontal y multifracturado es el que realizaron en una sociedad YPF con Compañía General de Combustibles (CGC), en el yacimiento Cañadón Deus del área Campo Indio Este – El Cerrito, un bloque donde CGC cuenta con una extensa actividad en el no convencional pero en el tight gas.
El pozo en cuestión, conocido como Maypa x1, aunque técnicamente se lo identifica en los registros nacionales como Ma.x-1(h), tiene una profundidad de 3.500 metros, con una rama horizontal de 760 metros en la cual se realizaron 12 etapas de fractura.
Este pozo de exploración se terminó de fracturar a fines de mayo, y según las declaraciones juradas presentadas por las operadoras, entró en producción en septiembre.
Si bien, las firmas no brindaron información, los registros oficiales de la Secretaría de Energía de la Nación, procesados por Energía On, dan cuenta que durante septiembre la perforación arrojó una producción total de 2.055 barriles de petróleo.
Este volumen representa un promedio diario de 68 barriles, un nivel muy bajo si se tiene en cuenta por ejemplo, que los primeros pozos con destino a Vaca Muerta en Río Negro dieron una producción diaria de 1.500 barriles. Pero no es claro si el pozo exploratorio de Palermo Aike estuvo todos los días en producción o tuvo ensayos puntuales.
En octubre, la producción del pozo Ma.x-1 (h) marcó un total de 1.470 barriles, que en la visión de la producción diaria, se reduciría a 47 barriles por día.
Mientras las expectativas están en que el shale del sur pueda reactivar al sector en pleno declino, un dato que sorprendió a todos los involucrados es el llamativo color del petróleo obtenido, dado que se trata de un amarillo intenso, casi dorado.
Es que, a pesar de la asociación del petróleo a un color oscuro, la densidad que tenga cada producción trae consigo modificaciones en esa tonalidad, pudiendo incluso llegar a ser casi transparente. Algo que se da con más frecuencia en los shales, como es este caso y el de Vaca Muerta, por ser crudos mucho más livianos que el tradicional Medanito argentino.
Palermo Aike: qué es y por qué hay tantas expectativas
Palermo Aike es una roca generadora de hidrocarburos, una formación geológica en donde hace millones de años se depositaron materiales orgánicos microscópicos, que con el paso del tiempo mutaron en petróleo y gas, migrando a la superficie a formar en este caso buena parte de la Cuenca Austral.
Pero dentro de esa roca generadora, que está a unos 3.000 a 3.500 metros bajo tierra, sigue existiendo una gran cantidad de petróleo y gas, que es lo que busca recuperar con la técnica del fracking. A diferencia de Vaca Muerta, en donde ya se comprobó la alta productividad de sus campos a bajos costos, en Palermo Aike se está justamente en la etapa de testear y determinar si la producción que pueda obtenerse allí será económicamente rentable.
Palermo Aike tiene una extensión de unos 12.600 kilómetros cuadrados, casi un tercio del tamaño de Vaca Muerta, y en su interior se estima que podría haber unos 10.000 millones de barriles equivalentes de petróleo.
De momento, la firma CGC realizó dos re-entry en viejos pozos que fueron hasta Palermo Aike en donde se hicieron fracturas hidráulicas y se obtuvo producción shale.
Pero el punto de análisis sigue estando, por estos días, en si la producción obtenida paga los costos de perforación y extracción, dejando además una ganancia lógica. Algo que parece simple, pero que en todo el mundo solo se logró dar en las formaciones de América del Norte y Vaca Muerta