Daniel Salas
En el hermoso poblado de Yavi sus autoridades municipales y comunidad celebraron el lunes pasado los 449 años de historia con una muestra cívica en la jornada central y actividades previas abarcando el deporte, la cultura, la educación y la solidaridad.
Como consecuencia de las cambiantes condiciones climática que se registran en la Puna desde las últimas semanas, los yaveños e invitados festejaron el aniversario bajo una persistente llovizna y un frío de otras épocas, que por un par de horas el sol logró despejar.
El comisionado municipal Antonio Borja, amable como lo demuestra cotidianamente y predispuesto a compartir la felicidad de su pueblo con la mayor cantidad de visitas (sin importarle la pertenencia política), con entusiasmo y placer como lo expresó durante el exquisito almuerzo de despedida.
En la hostería municipal estrechó las manos del intendente de Santa Victoria Oeste, Víctor Quispe, siendo el primer Ejecutivo municipal de la vecina provincia de Salta que se suma al aniversario, luego de haber encabezado una celebración similar en su comuna por los 221 años.
También recibió a los comisionados municipales de Mina Pirquitas, Rolando Flores; de Rinconada, Gerardo Alanoca; de Cieneguillas, Abel Santos; y de Barrios, Rubén Armella; a la presidenta del Concejo Deliberante de La Quiaca, Trinidad Taboada; a la coordinadora de la Asociación de la Puna, Camila Solís y a la diputada provincial, Alejandra Elías.
Luego de compartir un calentito desayuno y dialogar sobre temas de actualidad, junto a ellos y otras autoridades se dirigió hacia la avenida Campo Carrera para iniciar el acto protocolar que concluyó con un desfile cívico, escolar, militar y gaucho, donde toda la comunidad participó.
Saludó «en este día especial pese a la llovizna, que es una bendición porque en nuestra zona necesitamos de ella y debemos estar agradecidos», comenzó diciendo Borja en su discurso alusivo a la celebración.
Yavi «está lleno de historia, se pierde en los años desde que los primeros originarios comenzaron a habitar la región y prueba de ello son los restos arqueológicos que tenemos alrededor de y en el pueblo».
Los hechos acontecidos «hacen que este pueblo sea histórico y reconocido», luego comentó cómo es que los yaveños (en el 2007) comenzaron a retomar nuevamente la costumbre de reunirse por el aniversario.
Averiguando en documentos constató que el 18 de noviembre de 1575, un año después de la fundación de Tarija, «los mismos eran quiénes fundaban Yavi. Ahí decidimos en la comisión municipal organizar el festejo sabiendo que se pierde en la prehistoria».
Destacó que «a través de la vida democrática me dieron la posibilidad de conducir el municipio y el pueblo, lo cual es un honor»; reconoció que «a veces no somos considerados buenos funcionarios» y que cuando asumió, lo hizo «sabiendo que las condiciones políticas y económicas no eran las mejores. A pesar de ello me hice cargo de su administración para trabajar».
Aclaró que optó por no responsabilizar y quejarse de nadie si recibía o no ayuda; ponderó haber logrado conformar con las comunidades una Mesa de gestión para acordar un trabajo conjunto en el cual «tal vez no estamos haciendo mucho».
Además anunció que cursó invitaciones a autoridades provinciales y legislativas, y se lamentó porque «parece que los pueblos de la Puna se están retirando más de San Salvador de Jujuy porque pocas nos visitan».
Finalizado el desfile invitó a los presentes un almuerzo comunitario en el camping municipal y en dos salones de la comuna; más tarde hubo destrezas gauchas y carrera de burros que convocaron la atención de los vecinos.