En términos absolutos, el área metropolitana de la provincia pasó de tener 27 mil personas desempleadas a 32 mil en la comparación interanual. Se trata de “personas sin ocupación que buscan trabajo activamente y están disponibles para trabajar”, de acuerdo con la definición del organismo nacional.
Según especialistas consultados por El Sol, este incremento de 5 mil personas que no encuentran empleo en la región se vincula a factores tanto nacionales como internacionales.
¿Qué está impulsando el desempleo en Mendoza?
La economista Elena Alonso sostiene que el aumento del desempleo está vinculado a la recesión económica que ha afectado al país en los últimos meses. “El impacto recesivo que hemos vivido, sumado a la caída en las ventas y al aumento de los costos fijos, ha generado un contexto difícil para las empresas”, afirmó.
La especialista explicó que las tarifas de los servicios públicos, en particular, han afectado gravemente la estructura de costos del sector privado. “Las empresas, golpeadas por el alza en los costos de energía y otros servicios, han tenido que ajustar sus presupuestos y reducir personal para mantener la rentabilidad”, explicó Alonso.
Además, señaló que la eliminación de subsidios y el consecuente aumento de tarifas han reducido el consumo, afectando aún más a las empresas.
Comparación con otras regiones y factores educativos
El economista Carlos Rodríguez resaltó que, si bien el desempleo en Mendoza ha crecido, aún se mantiene por debajo de otras grandes áreas metropolitanas del país.
“Si lo comparamos con los principales aglomerados urbanos, como Córdoba, Rosario o Buenos Aires, Mendoza tiene un nivel de desocupación más bajo”, comentó Rodríguez.
Sin embargo, subrayó la importancia de analizar otros factores clave, como el nivel educativo de los desempleados. “Casi el 75% de las personas desempleadas en la región no tienen el secundario completo. Esta falta de formación les dificulta competir en el mercado laboral, donde quienes tienen mayores niveles de educación y capacitación encuentran más oportunidades”, agregó el economista.
Opiniones divididas sobre las causas del desempleo
Sebastián Laza ofreció una interpretación distinta sobre la situación. Para él, la inflación y el ajuste económico impulsado a nivel nacional son los principales factores detrás del incremento del desempleo. “La necesidad de generar más ingresos ha llevado a muchas personas a buscar trabajo adicional, lo que, paradójicamente, ha elevado la tasa de desocupación en Mendoza”, señaló el economista.
Laza también advirtió sobre la comparación de datos entre trimestres, argumentando que los efectos estacionales pueden distorsionar la interpretación de las cifras. “Cada trimestre tiene sus particularidades, y la estacionalidad puede generar variaciones en las tasas de empleo y desempleo que no reflejan cambios estructurales”, afirmó.
¿Qué se espera para fin de año?
De cara al cierre de 2024, los economistas coinciden en que no se anticipan grandes mejoras en el mercado laboral de la región. Para Alonso, “de aquí a fin de año no deberíamos ver un aumento significativo en el desempleo, aunque tampoco se espera una mejora considerable”.
Alonso proyecta una posible recuperación para el próximo año, con una leve mejora en los indicadores económicos: “Estimo que los valores actuales se mantendrán estables y que podríamos empezar a ver una disminución del desempleo en 2025”.
Por su parte, Rodríguez ofreció una perspectiva más optimista, señalando que “la situación es dinámica y dependerá de las políticas macroeconómicas que se implementen en los próximos meses”.
Laza, en cambio, vinculó las perspectivas de mejora al ritmo de reactivación económica: “Todo dependerá de cuánto se recupere la economía, y el REM proyecta un crecimiento del 8%”.
El desempleo a nivel nacional
A nivel nacional, la tasa de desocupación fue del 7,6% en el segundo trimestre del año, muy similar al 7,7% registrado en el primer trimestre. Sin embargo, este dato es superior al 6,2% reportado en el mismo período del año anterior.
De acuerdo con la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), hay aproximadamente 1,1 millones de personas desempleadas en Argentina. Estas personas son definidas como “aquellas sin ocupación que buscan trabajo activamente y están disponibles para trabajar”. A pesar de la desaceleración en la caída del empleo privado registrado, que pasó de una baja mensual del 0,6% en enero a un 0,2% en mayo, el panorama laboral sigue siendo preocupante.
Aunque el aumento del desempleo ha sido un dato negativo para la gestión actual, algunos analistas esperaban un impacto aún mayor de la recesión sobre el empleo, lo que hasta ahora no se ha materializado en las cifras oficiales