La ciudad de Zanoa, según el relato bíblico, estaba ubicada en la tierra prometida de Canaán, donde los israelitas se establecieron después de vagar 40 años en el desierto tras ser liberados de Egipto por Moisés.

Los arqueólogos excavaron el área en 2019 y desenterraron artefactos de gran relevancia histórica. Entre estos se encontró un asa de jarra de arcilla con la impresión del sello “lmlk”, que data de finales de la Edad del Hierro y está en excelente estado de conservación. Este sello hebreo significa “del Rey”.

Los investigadores señalaron que aproximadamente el 80% de la cerámica y todos los fragmentos de vidrio encontrados datan del Período Bizantino Temprano (siglo IV d.C.). Aunque algunos hallazgos podrían haber sido arrastrados pendiente abajo con el tiempo, la mayoría, especialmente los del período bizantino temprano, están relacionados con actividades agrícolas realizadas en las laderas de la colina.

Los expertos destacaron la gran cantidad de hallazgos y la «importancia potencial» del sitio. La identificación de Zanoa no solo aporta una visión más clara de la historia bíblica, sino que también proporciona una conexión tangible con los textos antiguos, ofreciendo a los arqueólogos y a los historiadores una oportunidad única para estudiar y comprender mejor la vida y las prácticas de las civilizaciones antiguas en esta región.

FUENTE: Diario Hoy.