Los casos mas llamativos son los de La Cumbre y La Falda. Pero también hay otros que reclaman que el conteo oficial no se compadece, por ejemplo, con los números de los padrones electorales.
Es un clásico de cada censo: los intendentes que reclaman porque entienden que la población de sus pueblos o ciudades es mayor a la que se ha censado. Junto con ese planteo, apuntan que al ser la coparticipación de impuestos proporcional a los habitantes se perjudica a sus municipios con un conteo errado.
En el caso de los recientes resultados de población por localidades, en Córdoba entre los casos más llamativos, y que suman dudas sobresalen las localidades de La Falda y de La Cumbre, en el departamento Punilla.
Lo extraño es que para La Falda el censo 2022 contabilizó 16.732 habitantes, apenas 353 habitantes más que en 2010, con un crecimiento del 3%. En La Cumbre es aún más singular: le da menos habitantes que hace 12 años (de 7.761 a 7.200 ahora). Y eso, en un departamento (Punilla), que ha registrado un aumento poblacional general superior al promedio de la provincia.
Los intendentes de ambas localidades remarcan que los números no se explican si se los coteja con la evolución de los padrones electorales o de la cantidad de usuarios de energía o de agua. Por ello, adelantaron que buscarán explicaciones ante el Ministerio de Gobierno de la Provincia y ante el organismo nacional Indec, que hizo el censo.
El intendente de La Falda, Javier Dieminger, precisó a La Estafeta que en las últimas elecciones municipales el padrón era de más de 14 mil personas y que para los comicios nacionales superaba las 16 mil.
Las dudas también se replican en la vecina Capilla del Monte, donde el censo registró un leve aumento de población, que el municipio considera que no refleja la realidad.
En tanto, en Villa Allende, el secretario de Gobierno. Felipe Crespo, planteó que el último padrón electoral local fue de 33.600 electores mayores de 16 años pero que el censo “arroja el ridículo número de 36 mil habitantes”, tras lo cual anticipó que reclamarán que se haga otro censo.
En su vecina Mendiolaza el planteo de su municipio es muy similar.
Sinsacate, en tanto, es una de las localidades donde el censo registró mayor aumento poblacional (un 99% en 12 años). Pero igual el intendente Carlos Ciprián aseguró estar “desconcertado” porque la cifra de habitantes es casi la misma que reflejaba del último padrón electoral.
Su pares vecinos de Jesús María, Federico Zárate, y de Colonia Caroya, Paola Nanini, también cuestionaron el relevamiento nacional. Para Zárate, la manera en que se realizó el Censo 2022 “fue un desastre” y, en su opinión, es la razón por la que demoraron la publicación de los datos oficiales por localidad.
Son sólo ejemplos de la lista de quejas que se van sumando.