

Así lo reveló el último estudio de la Cámara de Empresas Mineras (CAEM) según el cual el sector ya tiene en marcha proyectos de inversión por un total de US$19.500 millones, con la perspectiva de alcanzar los US$10.000 millones anuales en exportaciones en 2030.
En términos de producción, el potencial está estimado en cerca de 1,1 millones de toneladas en 2031, cifra que quintuplica el récord de 200.000 toneladas producidas en 2002, que se redujeron a 14.500 toneladas en 2024.
Además, aprovechando el nuevo Régimen de Incentivo a la Gran Inversión (RIGI) introducido por el gobierno de Javier Milei, los proyectos cupríferos ya superan a los de litio -estimados en US$13.000 millones- y, según la CAEM, podrían situar al país entre los 10 principales productores mundiales.
Los principales yacimientos se encuentran en la cordillera de los Andes de la provincia de San Juan y es precisamente en esta región donde los gigantes del sector como la australiana BHP y la canadiense Lundin Mining formaron recientemente una empresa conjunta para la explotación del mega yacimiento Vicuña con inversiones previstas en US$17.000 millones. (ANSA)
LA NACION