Camarones, donde una casa centenaria conecta a los viajeros con las tradiciones del pueblo

Camarones, donde una casa centenaria conecta a los viajeros con las tradiciones del pueblo

Cuatro vecinos transformaron una antigua vivienda de más de 100 años en La Matera, un emprendimiento que combina gastronomía, memoria rural y vida comunitaria en la localidad costera de Chubut.

La Matera, un espacio que recupera el espíritu de las estancias patagónicas, en el corazón de Camarones. Gentileza.

En Camarones, sobre la costa atlántica de Chubut, una vieja casona volvió a cobrar vida y sentido. Lo que durante un tiempo fue una pequeña cafetería conocida como “Lo de Berry”, estuvo a punto de desaparecer cuando sus dueñas decidieron cerrar. Pero la vocación de cuatro vecinos por preservar un espacio de encuentro y homenajear las raíces del pueblo cambió la historia.

Cómo nació La Matera en Camarones, Chubut


Flor Bertarini, Sofía Franchella, Sandra Martínez y Gabriel Cortinovis se unieron para crear La Matera, un proyecto que se define por la identidad patagónica, el trabajo colectivo y la revalorización de lo propio. Con muebles reciclados, objetos donados y una fuerte participación del pueblo, reconstruyeron el lugar como un rompecabezas cargado de historia y simbolismo.

“El nombre no es casual”, cuenta Franchella. “La matera es ese rincón en las estancias donde los paisanos se reúnen a la mañana para compartir un mate antes de salir al campo. Ese espíritu de comunidad es lo que quisimos recuperar”.

Además de ser un punto de encuentro para los vecinos, La Matera se volvió una visita obligada para quienes llegan a Camarones. Turistas de paso encuentran en este espacio una puerta de entrada a la identidad del pueblo, a través de sus sabores, objetos y relatos.

Camarones y La Matera: un espacio con alma rural


La Matera funciona como cafetería, pero su esencia va mucho más allá: es sala de juegos, escenario de historias y lugar de conversación. Su estética rinde homenaje a la vida rural: tijeras de esquila colgadas en las paredes, frascos de conservas caseras, y muebles restaurados que parecen hablar.

“El espacio se adapta a lo que cada uno necesita: tomar un café, jugar al truco, leer el diario o simplemente cruzarse con un vecino”, dice Franchella.

El proyecto también potencia la economía local. Las medialunas, los individuales y muchos otros productos que se usan o se sirven en el lugar provienen de emprendedores de la zona. “Hay una red silenciosa que hace posible todo esto”, afirma.

Camarones y La Matera: sabores con identidad local


La propuesta gastronómica apuesta a lo simple, pero con historia. Milanesas, empanadas y panes caseros conviven con platos que rescatan los ingredientes típicos del entorno. Entre ellos, se destacan los sorrentinos de cordero y una original masa de algas con relleno de salmón, que fusiona la tradición pesquera con la creatividad culinaria.

“El alga tiene historia en Camarones y queremos que la gente se anime a redescubrirla”, explica Franchella. “Nos interesa rescatar lo propio y mostrar nuevas formas de consumirlo”.

Quizás lo más valioso que ocurre en La Matera no se ve en el menú: está en la apropiación del lugar por parte del pueblo. Puesteros que bajan del campo, turistas que descubren un rincón con alma, vecinos que eligen pasar la tarde en un espacio compartido.

“Cuando vemos que la gente viene, se sienta, comparte y le da vida al lugar, sentimos que el esfuerzo valió la pena”, resume Franchella.

En tiempos donde el aislamiento parece ganar terreno, La Matera ofrece una alternativa: estar, compartir, pertenecer. “Este espacio sirve. Lo usan para salir de sus casas, para conectarse con otros… y eso le da alma al pueblo”, concluye (Con información de Agencia Ambiente Chubut).

Cómo llegar a Camarones y qué se puede hacer


Camarones es una pequeña localidad costera de Chubut, ubicada entre Trelew y Comodoro Rivadavia, a orillas del océano Atlántico.

Desde el Alto Valle de Río Negro y Neuquén, se puede ir en auto por la Ruta 3 hacia el sur -pasando por Puerto Madryn y Trelew-.

Luego hay que tomar el empalme con la Ruta Provincial 30 en el desvío a Camarones. El trayecto demanda unas 10 a 12 horas de viaje, dependiendo del punto de partida.

Además de disfrutar de La Matera, quienes visitan Camarones pueden recorrer el casco histórico del pueblo, conocer el Museo Perón -donde se cuenta la infancia del expresidente- y descubrir la Reserva Faunística Punta Tombo, uno de los mayores apostaderos de pingüinos de Magallanes del mundo. Las playas solitarias, los acantilados y los senderos costeros también invitan a conectar con la naturaleza y la tranquilidad del paisaje patagónico.

Más info de La Matera en https://www.instagram.com/lamateracamarones/

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *