El Concejo Deliberante de La Plata, la «gran capital», la ciudad íntegramente pensada, planificada y construida por Dardo Rocha, sancionó por unanimidad un nuevo Código de Ordenamiento Urbano.

La norma, que constituye uno de los pilares del compromiso electoral asumido por el intendente Julio Alak con la ciudadanía en la campaña de 2023, busca, según el presidente del legislativo local, Marcelo Galland, «retomar los valores fundacionales: volver a ser una ciudad planificada, una ciudad de iguales”.

Llamativamente, la ordenanza fue votada tanto por concejales de La Libertad Avanza, que descreen de la capacidad regulatoria u ordenadora del Estado, en cualquiera de sus tres niveles, como por los de la UCR y el PRO, que acompañaron a la gestión anterior en el sentido exactamente opuesto, que algunos califican como «un festival de excepciones».

El presidente del Concejo Deliberante, Galland, que tuvo a su cargo el trabajo legislativo de construcción de consensos, a lo largo del cual incorporó varios puntos a pedido de los distintos bloques opositores, destacó tanto la predisposición al diálogo del gobierno municipal como el trabajo técnico del secretario de Planeamiento, Sergio Rezza.

El primer paso de este proceso comenzó en julio, cuando se aprobó la conformación de un nuevo consejo consultivo, que tuvo un fuerte protagonismo, junto con la mencionada secretaría del Ejecutivo y la Comisión de Planeamiento del Concejo Deliberante, que preside Cintia Mansilla. 

Si su antecesor estaba dominado por los inmobiliarios, los martilleros y la Cámara de la Construcción local, y hasta concejales que terminaban estando de los dos lados del mostrador, el actual Consejo de Ordenamiento Urbano Territorial incorpora a sectores académicos, colegios profesionales de ingenieros y arquitectos y organizaciones de la sociedad civil.

Countries y villas, la pesada herencia de Garro

El nuevo código, que cuenta con 82 artículos, es el fruto de un largo trabajo legislativo. Entre otras cosas, reestablece taxativamente la zonificación de los territorios: urbano, periurbano, rural e industrial, algo que era central en el espíritu original de la ciudad y que se fue perdiendo durante los ocho años de gestión de Garro, en los  cuales se habilitaron más de 400 loteos y barrios privados, a razón de uno por semana, la mayoría en forma abiertamente irregular.

La norma establece un camino para la regularización administrativa de 170 de esos emprendimientos y deroga otros 280, cuya habilitación contradecía abiertamente la normativa provincial y la pirámide jurídica. El Partido de la Plata ordenó su territorio a través del Código de la Ordenanza 10.703. Pero, con el tiempo, se aprobaron alrededor de 60 modificatorias de ese instrumento, que promovieron el uso residencial del suelo por fuera del área normada.

En consecuencia, muchos de esos barrios contaban con la aprobación municipal pero, para la autoridad provincial, eran y siguen siendo absolutamente ilegales, lo que genera también un conflicto entre quienes compraron de buena fe y fueron estafados y quienes promovieron estafas aprovechando el desconocimiento ajeno.

«Estos procesos articulan grandes dificultades de acceso al hábitat con procesos de especulación inmobiliaria y mercantilización extrema del mercado de suelos, a la vez que propiciaban ampliaciones urbanas o modificatorias de procesos administrativos», sostienen documentos legislativos a los que tuvo acceso Buenos Aires/12. El ex intendente Julio Garro es actualmente objeto de una denuncia penal y una investigación judicial por esa práctica.

También se aborda una cuestión crítica para la memoria colectiva de los platenses, el riesgo de inundaciones, ya que se establece la prohibición de edificar en las zonas consideradas «de alto riesgo de inundación» y la construcción sólo bajo determinados parámetros en las zonas «de riesgo intermedio».

Vinculado a ese punto, ya que las zonas más inundables suelen ser utilizadas por sectores vulnerables para construir viviendas precarias, la norma establece la obligación, para el ejecutivo, de presentar un plan de relocalización y regularización de villas, asentamientos y barrios de emergencia.

Ocurre que, durante la gestión Garro proliferaron a la par tanto los countries y barrios privados para los segmentos medio alto y alto de la población y las villas.

La Plata llegó así a convertirse, en 2023, en el partido con más villas de los 135 que conforman la provincia, según el propio Registro Nacional de Barrios Populares (Renabap). 

De hecho, el aumento de la desigualdad y su reflejo en el (des)ordenamiento territorial fue una de las cuestiones abordadas reiteradamente durante el debate. La postal actual es la contracara exacta del ideal masónico de igualdad y fraternidad que inspiraba a Dardo Rocha y a su arquitecto, el francés Pedro Benoit

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