
Quintana Energy y TBS seguirán explorando el potencial no convencional de la lengua mendocina en Vaca Muerta.
La UTE Quintana Energy – TBS llevará a cabo un plan de exploración no convencional en Mendoza. Así se conoció después que el Gobierno de Mendoza autorizó la prórroga por 10 años de las concesiones de explotación hidrocarburífera en las áreas Altiplanicie del Payún, Cañadón Amarillo y El Portón.
“Con esta decisión, la Provincia da por finalizado el proceso de cesiones y prórrogas del Plan Andes en Mendoza, consolidando así un modelo de desarrollo productivo con foco en inversión y sostenibilidad”, destacó la ministra de Energía y Ambiente, Jimena Latorre.
Esta medida se produce luego de que, el 19 de febrero, el Ministerio de Energía y Ambiente autorizara la cesión por parte de YPF a la UTE Quintana-TSB de las áreas Chihuido de la Salina, Chihuido de la Salina Sur, Altiplanicie del Payún, Cañadón Amarillo, El Portón, y el 14,42% de participación en el Área Confluencia Sur, aprobada mediante la resolución ministerial 28/2025.
El plan no convencional
“Dentro del plan de inversiones comprometidas se destaca un ambicioso proyecto exploratorio sobre la formación Vaca Muerta en el bloque Cañadón Amarillo, donde se desarrollará un plan piloto no convencional (NOC) por un total de 44 millones de dólares”, comentó el director de Hidrocarburos, Lucas Erio.
Además, subrayó que aquel incluye la adquisición de sísmica 3D, y la perforación de un pozo vertical y de dos pozos horizontales de 1.500 metros de ramas laterales.
En caso de resultar técnica y económicamente viable, se proyecta una inversión contingente de hasta 1.350 millones de dólares para el desarrollo completo del bloque (full field development), posicionando así a Mendoza como un nuevo actor en la expansión del desarrollo no convencional del país.
Este proyecto se suma a la actividad exploratoria no convencional que actualmente ejecuta YPF en el bloque CNVII A y Paso de las Bardas Norte, donde ya perforó dos pozos piloto y ha comprometido nueva actividad para los próximos años.
El compromiso asumido por la UTE Quintana-TSB refuerza esta tendencia y ratifica el potencial de la Vaca Muerta mendocina como una frontera energética viable y atractiva para nuevas inversiones.
Un proyecto innovador
Otra iniciativa clave en esta prórroga es un proyecto de inyección y almacenamiento de gas en El Portón, que contempla una inversión de aproximadamente 10 millones de dólares. Este plan busca convertir reservorios depletados (vaciados) en almacenes subterráneos de gas, para inyectar gas en verano, cuando la demanda es baja, y extraerlo en invierno, cuando se incrementa el consumo, asegurando así la operatividad anual y la eficiencia energética.
Esta propuesta representa una innovación en la gestión de recursos y abre la posibilidad de reconvertir yacimientos maduros en infraestructura estratégica para el sistema energético provincial y nacional.
Visión de futuro
La presentación de estos planes de inversión por parte de operadores especializados evidencia el atractivo que aún conservan estos activos cuando se los aborda con enfoque técnico, compromiso de inversión y visión de largo plazo.
Las inversiones incluyen actividades de reactivación de pozos, saneamiento, exploración convencional, desarrollo de infraestructura y tecnologías complementarias.
Además, la UTE también prevé desplegar actividad exploratoria complementaria en las tres áreas, lo que demuestra que aún existen oportunidades significativas en el convencional y que las áreas maduras de Mendoza pueden seguir generando valor a través de un manejo eficiente.
Con esta prórroga, Mendoza reafirma su compromiso con el desarrollo energético en un contexto en el cual operadores especializados y de menor escala aportan foco y eficiencia para transformar activos maduros en oportunidades de crecimiento.
Estas decisiones marcan un momento bisagra para la industria hidrocarburífera provincial, que combina la continuidad operativa, la exploración de nuevas fronteras como Vaca Muerta y la consolidación de políticas públicas activas que aseguren seguridad jurídica, desarrollo sostenible e inversión de largo plazo