En el país los grandes proyectos están atados a la posibilidad de ingresar al Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones, mientras tanto Mexico pica en punta en el mercado del GNL.
En septiembre pasado México realizó su primera exportación de gas natural licuado (GNL) y con eso bajó la bandera de largada de una carrera una carrera regional en la que espera anotarse Argentina en breve. Pero claro, para eso faltan millonarias inversiones y meses de trabajo antes de que estén operativas las terminales portuarias en la costa patagónica argentina.
Así, México primereó con una primera exportación a China y proyecta la construcción de otras más. El portal especializado Más Energía (+e) menciona un informe «Mexico NRG Dashboard» de Energy Analytics Institute, según el cual «este avance técnico y comercial posiciona a México como un potencial proveedor clave para mercados internacionales, especialmente Asia».
La información precisa destaca que este primer cargamento salió de la planta Fast LNG, ubicada en Altamira, estado de Tamaulipas, operada por New Fortress Energy. «Este primer envío consistió en aproximadamente 70 mil metros cúbicos de GNL, equivalentes a unas 47 mil toneladas, transportados por el buque ‘Energos Princess’ hacia Europa. Esta instalación, con una capacidad inicial de 1.4 millones de toneladas anuales (mtpa), utiliza gas natural transportado desde el hub de Agua Dulce en Texas», reseñó Más Energía.
En este punto, vale aclarar que México depende en gran forma del gas de Estados Unidos, por lo que está desarrollando una integración energética entre ambos países para exportar GNL, aunque claramente depende del abastecimiento del gas natural del país del norte. El proyecto prevé la ampliación de la planta en una segunda fase, FLNG 2, prevista para 2026, estimando duplicar la capacidad a 2.8 mtpa, de modo de consolidar la infraestructura exportadora del país.
Entre tanto, en Argentina está avanzando el proyecto de exportar GNL, para aprovechar el despegue de Vaca Muerta, donde se destaca el proyecto Southern Energy en la provincia de Río Negro. Es una iniciativa del consorcio, integrado por PAE, Golar, Pampa Energía, YPF y Harbour, que contempla la instalación de una unidad flotante de licuefacción (FLNG) en el Golfo San Matías.
Tendrá una capacidad proyectada de 2.45 millones de toneladas anuales, equivalente a 11.5 millones de metros cúbicos diarios de gas natural, previendo comenzar a exportar en 2027. A partir de una inversión inicial de US$ 2.900 millones, el consorcio busca diversificar las exportaciones argentinas de posicionarse como un jugador en mercados internacionales.
Mientras tanto, México busca desarrollar una ambiciosa estrategia a partir de su costa en el Pacífico, destinada a abastecer la sólida demanda de GNL en los mercados asiáticos. Así, surgen proyectos como Energía Costa Azul (ECA), Saguaro Energía LNG y Salina Cruz LNG, que representan piezas clave en esta apuesta.
En este contexto, las plantas se han puesto en lugares estratégicos, lo que reduce costos y tiempos logísticos, al evitar el costoso Canal de Panamá.
Por su parte, el proyecto Energía Costa Azul, desarrollado por Sempra Infrastructure, tie previsto comenzar operaciones en 2026 con una capacidad proyectada de 15.3 mtpa, mientras que Saguaro Energía LNG, liderado por Mexico Pacific Limited, se perfila como el proyecto más grande, con 30 mtpa.