El POT plantea un enfoque a largo plazo que integra aspectos sociales, económicos, ambientales y de infraestructura, involucrando a la comunidad en la definición de un «Territorio Deseado» que promueva el arraigo, la preservación de tradiciones y la mejora en la calidad de vida de sus pobladores. Entre los principales desafíos, se destacan la mejora de la conectividad y la gestión de recursos naturales, claves para el desarrollo de la zona.
Durante la elaboración del plan, se priorizó la participación activa de todos los sectores de la comunidad mediante talleres y reuniones, donde los ciudadanos compartieron sus ideas y preocupaciones, con el propósito de enfocarse en el desarrollo local de Fiambalá, promoviendo un modelo sostenible que fortalezca la economía local y preserve el patrimonio cultural