Economías Regionales. Con más luces rojas y amarillas en el Semáforo de CONINAGRO

La mayoría de las economías regionales de la Argentina exhiben signos de crisis y advertencia con indicadores que muestran precios deprimidos y costos crecientes que ponen en jaque a las producciones locales.

De esta manera, de los 19 sectores relevados, 12 tienen luces rojas, 4 luces amarillas y tan sólo 3 verdes. Entre los sectores más afectados por esta coyuntura figuran el sector ovino, seguido por la apicultura (miel) y la vitivinicultura (vino y mosto). También, a la producción porcina y a los granos se les prenden luces rojas.

Estos datos surgen del Semáforo de CONINAGRO de julio con datos relevados durante el mes de junio por el área de economía de la entidad cooperativista.

Luces rojas, amarillas y verdes

El Semáforo del mes de julio muestra que se mantuvo la tendencia que se vino dando durante el mes pasado ya que este último relevamiento registró una mayor cantidad de producciones con luces rojas.

Específicamente, de todas las economías regionales 3 tiene luz verde (o sea, evidenciarían signos de crecimiento), 4 están en amarillo (es decir, con una luz de advertencia) y 12 están en rojo (o sea, están directamente en crisis o con signos de crisis).

En ese sentido, los colores verdes se explican por tratarse de producciones que cuentan con señales de recuperación y precios al productor más atractivos. En este grupo entran el arroz, las hortalizas y el tabaco.

Por su parte, las luces amarillas representan cambios en los mercados que plantean un grado de incertidumbre respecto de su posible transferencia al esquema de precios/costos de los productores. En esta parte del tablero se incluye, por ejemplo, a la carne bovina que paso de verde a amarillo y el sector avícola que se mantiene con este color por segundo mes consecutivo.

Y las luces las rojas, al igual que el mes pasado, combinan alguna de estas situaciones que ponen a las actividades directamente en crisis o con signos de crisis: baja demanda, costos elevados para el esquema productivo, precios estancados y exportaciones o mercado interno deprimidos.

En este segmento, entre otros, se ubican la producción ovina, la porcina, la avicultura y la vitivinicultura. También, los cítricos dulces (naranjas, mandarinas y pomelos), la producción forestal y la producción de granos (trigo, soja, maíz, girasol, cebada y sorgo).

Es decir, los principales fundamentos de este complicado panorama que prende mayoría de luces rojas en el Semáforo de Coninagro es que se trata de producciones regionales que tienen precios cuya dinámica en el mes fue por debajo de la inflación, lo que a su vez repercute en un aumento de los costos al productor, que crecen a mayor velocidad que los precios de cada actividad relevada por la entidad cooperativista

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