Tras la denuncia, la multinacional aclaró que el exCEO actualmente no tiene vinculación con la empresa y que hubo una reunión con las autoridades para trabajar en conjunto; a la mañana hubo una allanamiento en su sede
Mediante un comunicado, Syngenta expresó: “Al respecto, queremos aclarar que el Sr. Antonio Aracre actualmente no tiene vinculación alguna con la empresa, ni con sus órganos directivos o consultivos a nivel local, regional ni de la República Popular de China. Las manifestaciones públicas del Sr. Aracre no representan la posición de la compañía”.
Asimismo, destacaron que hoy representantes institucionales de Syngenta Agro S.A. se reunieron con autoridades de Aduana donde se acordó trabajar conjuntamente a fines de analizar diferencias técnicas referidas a operaciones de años anteriores durante la presidencia de Aracre.
Según pudo saber LA NACION, unas horas antes de esa reunión, más precisamente a las 9.30 de la mañana, se efectuó una allanamiento en la sede de la compañía.
Por último, la firma comentó que adicionalmente se abordaron aspectos vinculados con el pago de importaciones en yuanes donde la empresa puede cumplir un rol relevante en ayudar a viabilizar esta herramienta. “Syngenta siempre opera en cumplimiento de normas y regulaciones locales e internacionales y reafirma su compromiso a largo plazo con Argentina”, comunicó la empresa.
De acuerdo con lo informado la semana pasada por la Administración Nacional de Aduanas, Syngenta, la firma agroquímica en la que Aracre trabajó hasta diciembre 2022, fue imputada por presunto “contrabando calificado” por un juez federal de Campana. Esta investigación resultó a partir de una denuncia por supuesta “triangulación de importaciones con falsificación de documentación en el ingreso de mercadería al país”.
La Aduana, conducida por Guillermo Michel, uno de los hombres más cercanos al ministro de Economía, Sergio Massa, especificó que está bajo análisis la facturación de importaciones provenientes de Estados Unidos, con supuestas triangulaciones indebidas vía un intermediario, Syngenta Agro Uruguay, que responde a la misma sede en Basilea, Suiza, que la empresa local. “Le reclama a la productora de agroquímicos haber presentado documentos adulterados o falsos ante el ingreso de la mercadería al país”, informaron.
Según la imputación, varias de las maniobras de triangulación realizadas para evadir impuestos nacionales con Uruguay, se habrían dado cuando Aracre era CEO. La Aduana, organismo que depende de la AFIP, dice que observó “potenciales delitos durante los últimos cuatro años de su gestión, entre 2018 y 2022″.
Ante esta situación, Aracre comentó en diálogo con Radio 990: “Algunos periodistas me dijeron que tenían esa información [por la denuncia de contrabando calificado], pero hasta el día de ayer [por el jueves de la semana pasada] no tuve ninguna notificación desde la compañía, me suena raro, con 37 años en la compañía y 12 de CEO nunca pisé un tribunal de nada”.
El exfuncionario agregó que si Aduana cree que hay algo mal liquidado, algo mal hecho, está en todo su derecho de analizar y ver. “Yo ya no tengo nada que ver con la empresa, es una multinacional y la conozco, sé que lo que haya que hacer lo va a hacer porque es una empresa que no está para ganar dinero con la evasión de impuestos, sino con la venta de sus productos”, concluyó.
LA NACION