La pobreza llegó al 41,8% de los habitantes en el 2º semestre de 2022. Y en el país al 39,2%.Hay una suba de ocho puntos respecto al primer semestre del año pasado, cuando el índice fue del 33,8%.
El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos informó ayer que la pobreza en el Gran Jujuy alcanzó al 41,8 por ciento de los habitantes en el segundo semestre de 2022, cifra que estuvo por encima de la media nacional del 39,2 por ciento.
En el Gran Jujuy la indigencia se ubicó en el 8,5 por ciento de los ciudadanos, afectando a un total de 30.149 personas.
El índice de Jujuy muestra un aumento de ocho puntos en relación al primer semestre del año pasado, cuando los pobres eran el 33,8 por ciento. Si se compara el dato con el mismo mes de 2022, cuando la cifra era del 36,2 por ciento, la suba fue menos pronunciada.
De esta manera, en el aglomerado hay más de 148 mil personas que son pobres y más de 11,4 millones en toda la Argentina.
En el caso de la indigencia, en el Gran Jujuy el dato se ubicó en el 8,5 por ciento de los ciudadanos, afectando a un total de 30.149 personas. En el orden nacional la línea de indigencia fue del 8,1 por ciento y alcanzó a más de 2,3 millones de habitantes.
Las cifras del Indec abarcan a una parte de la población, por lo que si se proyectan a todo el país la cantidad de pobres rondaría los 17,6 millones de personas.
¿Aumentará?
Los datos se conocen en medio de un escenario marcado por la sequía, los salarios en baja y una inflación que no da tregua, por la que se presume que la tendencia seguirá en sentido ascendente.
Los analistas habían anticipado en la previa que el número de la pobreza superaría el 40%, un salto que se explica por la escalada del índice de precios, que cerró el año pasado con un alza del 94,8%.
En el país, la pobreza en la primera mitad del 2022 había alcanzado al 36,5% de la población. La indigencia había sido del 8,8%, apenas mayor.
En lo que va de la gestión de Alberto Fernández, el registro más alto había sido el del segundo semestre del 2020, con 42%, cuando la pandemia hizo saltar el índice a los registros más altos desde el 2003.
Desde aquel dato del 42% en 2020, todos las mediciones fueron mostrando una caída en la pobreza.
A nivel nacional, en la previa se supo que la Canasta Básica Total (CBT), que establece el umbral de la pobreza, aumentó 8,3% en febrero de este año, por lo que una familia tipo, de cuatro integrantes (dos adultos y dos chicos) necesitó $177.063 para no ser considerada pobre.
En tanto, la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que define la línea de indigencia, marcó también un incremento del 11,7 %, por lo que ese hogar requirió de $80.483 para cubrir sus necesidades básicas para subsistir.
Durante 2022, en especial en el último trimestre, con mayor actividad y empleo, hubo un salto de los indigentes que viven en la Ciudad de Buenos Aires: subió del 6 al 7,7%, o de 186.000 a 237.000 personas.
Ese aumento casi se duplica en relación a fines de 2015, cuando la indigencia era de 4,1%. El dato se conoció el 21 de marzo.