Mejoran las relaciones insumo/producto por la suba de los granos y el desplome de los fertilizantes y herbicidas

La imposibilidad de sembrar por la sequía catapultó los precios de la soja y del maíz, en tanto que los insumos caen en consonancia con la tendencia de los mercados mundiales

En las últimas semanas la seca, con su consecuencia, la imposibilidad de sembrar, provocó que el precio interno de los granos gruesos tomara una altura impensada, a bordo de un avión que venía carreteando con gran velocidad en noviembre y despegó a toda máquina en diciembre. Los valores del Matba-Rofex lo certifican: la posición mayo de 2023 para soja rompió una barrera psicológica y cotiza a 402US$ versus 356US$/t de principios de octubre de 2022. El maíz julio se puede vender a 238US$/t versus 220 que se ofrecían a la misma fecha.

Simultáneamente, el otro avión que moviliza los precios de los insumos agrícolas va perdiendo altura, luego de haber llegado a niveles que los tornaban imposibles de usar. Desde 2021, la urea y los fertilizantes fosfatados perdieron el 50% de su valor, y el glifosato se derrumbó 30%.

Estos comportamientos determinan que las relaciones insumo/producto vuelvan a ser favorables para quienes tengan granos gruesos implantados con buena evolución y quieran ir asegurando la provisión de insumos para el ciclo agrícola 2023/24.

En el cuadro, preparado por Jeremías Battistoni, analista de granos de AZ-Group, se puede ver que se necesita 16% menos de soja de la posición mayo de 2023 para comprar una tonelada de urea respecto del promedio de los últimos tres años.

Algo parecido ocurre con el fosfato monoamónico -se requiere 15% menos-, con el glifosato -se debe vender 11% menos- y con el gasoil (-16%). Con el maíz entrega julio de 2023 pasa algo parecido, con los siguientes datos: urea -16%; fosfato monoamónico -17% ; glifosato -13% y gasoil -17%.

Un círculo lleno indica que existe una relación insumo/producto favorable para la compra. El tamaño del círculo expresa su variación positiva con respecto al promedio de los últimos tres años. Un círculo sin color indica una relación insumo/producto no favorable para la compra
Un círculo lleno indica que existe una relación insumo/producto favorable para la compra. El tamaño del círculo expresa su variación positiva con respecto al promedio de los últimos tres años. Un círculo sin color indica una relación insumo/producto no favorable para la compra
Frente a esta realidad caben dos posturas, según el técnico: la más conservadora propone aprovechar el rally de precios de los granos y el derrumbe de los insumos para ir asegurando, al menos, una parte de los insumos 2023/24, y así evitar la posibilidad de desabastecimiento por futuras restricciones a las importaciones. No obstante, esta conducta tiene el riesgo de bajos rindes si continúa la adversidad climática.

La actitud más audaz sería esperar que las tendencias de precios se acentúen: “Ver hasta dónde llegan las cotizaciones de los granos y de los insumos, y estar preparados para aprovechar oportunidades”. Esta decisión también permitiría ir viendo la evolución de los rindes en de los cultivos.

Por último, las relaciones de los insumos con granos disponibles son aún más favorables que las calculadas para la época de cosecha en el otoño de 2023, pero enfrentan el problema de bajos stocks.

“Quien había comprometido, en los inicios del cultivo, el 30-40% del trigo que esperaba cosechar, se encuentra que debe entregar casi todo por la merma de rindes provocada por la seca. Por otro lado, ha quedado muy poca soja en los campos luego de los dos Programas de Incremento Exportador”, señala el analista.

En síntesis: están habiendo movimientos en la ecuación económica de los granos gruesos producto de la sequía interna que se combinan con otros efectos que están apareciendo en el mundo y pueden generar oportunidades para aquellos que hayan tenido la fortuna de recibir suficientes lluvias para una buena evolución de los cultivos de granos gruesos

– LA NACIÓN